La función referencial es una manera de usar el lenguaje que se utiliza para transmitir información de forma objetiva. Por eso también recibe el nombre de función informativa o función representativa.
Cabe destacar que, para el establecimiento de una comunicación, el emisor se encarga de enviar un mensaje al receptor a través de un cierto canal. Los individuos involucrados en este proceso tienen que compartir el mismo código para que la comprensión del mensaje resulte posible. La función referencial, en este marco, se hace presente cuando el mensaje transmitido se refiere a algo externo al acto comunicativo y que puede ser sometido a una verificación.
A la función referencial también se la conoce como función informativa o función representativa.
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ResumenCaracterísticas de la función referencial
La función referencial tiene varias características que permiten identificarla. Por un lado, se trata de una función del lenguaje que apela a la denotación: es decir, al significado literal de los términos. Suele basarse en el uso de verbos y sustantivos para el desarrollo de contenidos que tienen un único sentido (por lo tanto, son monosémicos).
Lo que hace la función referencial es señalar acontecimientos o elementos de la realidad. Permite que el receptor acceda a datos concretos del mundo circundante, sin que aparezcan en el mensaje las opiniones ni los deseos del emisor. La referencia de esta función, pues, se encuentra afuera del acto comunicativo.
El periodismo suele recurrir a la función referencial.
Su uso en el periodismo
El uso de la función referencial es habitual en el periodismo. La narrativa periodística suele orientarse a la exposición y la descripción de los acontecimientos, con lo cual esta función resulta apropiada.
Por supuesto, hay matices y excepciones. Cuando un periodista pretende dar una explicación acerca de algún asunto político, es probable que deje aflorar su subjetividad y que no utilice la función referencial. Lo mismo ocurre en el discurso de un periodista deportivo partidario o en la crítica de un espectáculo (una obra de teatro, un concierto, etc.).
Supongamos que una nota publicada en un diario indica: «De acuerdo a lo que puede observarse en las filmaciones de las cámaras de seguridad, el agresor es un hombre calvo que, en el momento del hecho, vestía un pantalón negro y una camisa a cuadros. Los registros muestran que ingresó al edificio a las 19:45 del martes 4 de agosto y salió media hora después». Este artículo periodístico hace uso de la función referencial.
Veamos otro ejemplo: «Con dos goles de Lionel Messi y uno de Ángel Di María, Argentina derrotó a Bélgica por 3 a 0». Esta frase apela a la función referencial. Sin embargo, si se menciona «Con dos golazos del mejor jugador del mundo, Lionel Messi, y una obra de arte de Ángel Di María, Argentina dio cátedra y aplastó a Bélgica por 3 a 0», estamos ante una oración que incorpora elementos subjetivos y cuyo enunciado va más allá de la información directa.
La función referencial se utiliza en comunicaciones y textos científicos.
La función referencial en la divulgación científica
La función referencial en la divulgación científica tiene una gran importancia. Recurriendo a un lenguaje técnico, permite suministrar datos puntuales y aportar conocimiento con coherencia y sin caer en la ambigüedad.
Hacer una comparación entre dos fenómenos con el objetivo de evidenciar un contraste o analizar una relación de causa y efecto para explicar el origen y/o la consecuencia de algo es posible con la función referencial. Si bien en una hipótesis, una teoría o una argumentación de un científico siempre está la visión o la postura del especialista, en este ámbito se busca compartir datos objetivos y susceptibles de ser comprobados.
Su utilización en el lenguaje coloquial
En el lenguaje informal que se emplea de manera cotidiana también puede aprovecharse la función referencial. Cuando alguien envía un mensaje por WhatsApp a sus amigos informando «Los espero mañana a las 20:30 en mi casa», está usando esta función del lenguaje. Lo mismo hace quien, en un diálogo con otra persona, le comenta a su interlocutor: «Me compré unas bermudas de color marrón y una camiseta verde en la tienda que está enfrente de la municipalidad».
«Anoche cenamos pizza de mozzarella», «El cuaderno me costó 500 pesos» y «Juan tiene tres televisores en su oficina» son otras expresiones que, por sus características, se enmarcan en el contexto de la función informativa.
Roman Jakobson y la función referencial
No se puede dejar de mencionar que la función referencial es una de las seis funciones del lenguaje que describió Roman Jakobson. Este pensador ruso nacido en 1896 y fallecido en 1982 dejó una huella en la lingüística con su trabajo.
Además de la función referencial, Jakobson hizo referencia a la función emotiva o expresiva, que tiene a la subjetividad como rasgos primordial y que sirve para la expresión de emociones y sentimientos. También aludió a la función conativa o apelativa, que se propone influir en la conducta del otro.
La función fática o relacional (dirigida a propiciar el comienzo, la interrupción, la extensión o el cierre de una comunicación), la función poética o estética (que privilegia la forma sobre el contenido) y la función metalingüística (orientada al lenguaje en sí mismo) son las otras funciones del lenguaje que analizó Jakobson en su clasificación.
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