Geoide es un término que, desde la perspectiva de la geodesia, permite describir la apariencia teórica de la Tierra. Esta ciencia matemática tiene el propósito de determinar la magnitud y la figura del globo terrestre para construir los mapas adecuados. El concepto de geodesia deriva de un vocablo griego que puede traducirse al español como “división de la tierra”.
En concreto podemos determinar que geoide tiene su origen etimológico en el griego porque así lo conseguimos descubrir cuando procedemos a estudiar su formación. De esta manera aprendemos que dicho término es fruto de la suma de dos partes claramente diferenciadas como son la palabra geo que es sinónimo de “tierra” y el vocablo eidos que puede traducirse a su vez como “aspecto o apariencia visual”.
Qué es un geoide
Un geoide, por lo tanto, es un cuerpo de formato casi esférico que evidencia un leve achatamiento en sus extremos. Este aplanamiento polar con su consecuente ensanchamiento ecuatorial se debe a los efectos de la gravitación y de la fuerza centrífuga que se genera con el movimiento de rotación sobre su eje.
Isaac Newton ya había considerado que la Tierra era un geoide, una hipótesis que ampliaron tiempo después Jacques Cassini, Charles Marie de La Condamine, Louis Godin y Carl Friedrich Gauss, entre otros científicos.
Como hemos citado anteriormente la geodesia, que es una rama de las geociencias, es la que se encarga de estudiar la representación de la apariencia de la Tierra así como de la superficie de la misma. Pero no sólo de ella sino también de las diversas formas naturales y artificiales que en la misma hacen acto de presencia tanto desde un punto de vista general como desde una perspectiva parcial.
Divisiones de la geodesia
En concreto, dicha ciencia se puede dividir en tres ramas específicas:
Geodesia física. Dinámica, astronómica o clásica es también como se conoce a esta mencionada área que tiene como objeto de trabajo la definición de la figura propia de nuestro planeta.
Geodesia teórica. La fuerza de la gravedad es, sin lugar a dudas, el eje entorno al cual gira esta ciencia donde también se tienen muy en cuenta elementos tales como el movimiento de rotación de la Tierra o las mareas marítimas.
Geodesia cartográfica. La representación de nuestro planeta en documentos cartográficos o planimétricos es la base fundamental del trabajo de esta rama de la ciencia que da lugar a lo que se conoce como proyecciones estereográficas o transversales.
Geoides y gravimetría
La gravimetría es la técnica para la medición del campo de gravedad. De acuerdo a las herramientas gravimétricas, el geoide constituye una superficie física que se define por un cierto potencial gravitatorio que se mantiene constante en toda su superficie. En el caso de la Tierra, se trabaja con la superficie media del océano sin tener en cuenta las mareas, el oleaje, la corriente y la rotación terrestre. Por eso la apariencia del geoide no resulta idéntica respecto a la topografía de la Tierra, en la que entran en juego fuerzas endógenas y exógenas.
El formato del geoide, por lo tanto, puede establecerse a partir de medir la magnitud de la intensidad de la gravedad en diversos puntos de la superficie. La aceleración de la gravedad aumenta desde el ecuador hacia los polos.