HDMI es una sigla inglesa que alude a High Definition Multimedia Interface. Esta expresión puede traducirse en nuestra lengua como Interfaz Multimedia de Alta Definición.
Se trata de una norma que permite la transmisión de video digital de alta definición y audio digital multicanal sin comprimir a través de un único cable. Empresas como Sony, Panasonic, Philips, Hitachi y Toshiba impulsaron esta tecnología como reemplazo del euroconector, que requería al menos de dos cables.
Gracias a la tecnología HDMI, es posible conectar un dispositivo como ser una consola de videojuegos, un reproductor de Blu-ray o una computadora (un ordenador) a un televisor. El HDMI, en definitiva, transmite video y audio entre dos dispositivos mediante un único cable. Esto no sólo supone una mayor comodidad con respecto a los conectores antiguos que requerían más de un cable, sino que otra de las ventajas del HDMI es que su conector más común es relativamente pequeño en comparación con sus antecesores.
El conector HDMI estándar, conocido como tipo A, tiene 19 pines. El HDMI tipo C y el HDMI tipo D también cuentan con 19 pines, aunque son más pequeños y están orientados a la conexión de dispositivos portátiles (teléfonos inteligentes, tablets, etc.). Además existe el HDMI tipo B, de 29 pines, cuyo uso aún no es masivo, diseñado para las pantallas del futuro que tendrá mayor resolución.
Desde su creación, la tecnología HDMI ha ido evolucionando para incrementar sus capacidades. Por eso es posible reconocer varias versiones de HDMI, desde el HDMI 1.0 (que soporta una velocidad máxima de 4,9 Gbps) hasta el HDMI 2.1 (48 Gbps), pasando por el HDMI 1.2, el HDMI 1.3, el HDMI 1.4 y el HDMI 2.0.
Es importante mencionar que, aunque la norma HDMI no establece una longitud máxima para los cables, a partir de una cierta longitud la señal comienza a atenuarse.
Si bien HDMI es la tecnología más usada para transmitir audio y vídeo de alta resolución a todo tipo de pantallas, existe también DisplayPort, una alternativa menos popular pero que presenta ciertas ventajas. Desde su lanzamiento, DisplayPort les ofreció a los usuarios la posibilidad de transmitir una señal de ultra alta definición (UHD), es decir de 4k, a 60Hz, algo que con HDMI recién fue posible con su versión 2.0 y hasta entonces requería el uso de dos cables HDMI 1.4 conectados simultáneamente a la pantalla.
Dado que DisplayPort es menos conocido que HDMI, es común encontrar información errónea en Internet al realizar búsquedas, ya sea para resolver problemas o para comprar un cable. Sin embargo, escoger una de estas dos tecnologías no siempre depende de las preferencias de cada usuario, sino que en general éste se ve limitado a las opciones presentes en sus dispositivos. Por ejemplo, si nuestro ordenador portátil solamente tiene una salida mini DisplayPort y nuestro televisor o monitor externo, una HDMI, deberemos conseguir un adaptador.
Con respecto a los protocolos de canales de HDMI, podemos mencionar los siguientes:
* TMDS: transmite vídeo, audio y datos denominados «auxiliares». Puede tener un método de señalización de enlace simple o doble, como se puede apreciar en HDMI tipo A o B, respectivamente. La frecuencia de píxeles para la información de vídeo va desde los 25 MHz hasta los 330 MHz, y cada uno puede tener una profundidad de hasta 24 bits, de forma independiente a la frecuencia. El máximo de canales de audio es ocho;
* CEC: se basa en el protocolo AV Link. Se usa para operaciones remotas y tiene un bus de doble sentido. Su definición tuvo lugar con la especificación HDMI 1.0 y también se conoce como Anynet, Aquos Link, BRAVIA Link, Regza Link, VIERA Link y EasyLink;
* HDCP: se trata de un protocolo para proteger el contenido de las copias piratas, y repercute en que ciertos archivos de audio y vídeo no puedan ser transmitidos entre ciertos dispositivos a través de un cable HDMI.