Hexadecimal es un adjetivo que se emplea en el ámbito de las matemáticas para aludir al sistema de numeración cuya base es el número dieciséis (16). En la actualidad este sistema suele utilizarse en la informática ya que un byte (la unidad básica de memoria) equivale a dos dígitos hexadecimales.
El sistema hexadecimal, que se abrevia Hex, apela a la notación posicional. Esto quiere decir que cada uno de sus dígitos adquiere un valor de acuerdo a su posición relativa, que se encuentra determinada por la base. Esta base, a su vez, refiere a la cantidad de dígitos que se necesitan para escribir un número.
Los dígitos del sistema hexadecimal
Como la base del sistema hexadecimal es dieciséis, se requieren dieciséis dígitos diferentes para la escritura. Por eso, además de los diez dígitos del sistema decimal (9, 8, 7, 6, 5, 4, 3, 2, 1 y 0), se usan las primeras seis letras del alfabeto latino: A, B, C, D, E y F.
De este modo, podemos afirmar que el conjunto de símbolos que utiliza el sistema hexadecimal está formado por los números que van del 0 al 9 y las letras de la A a la F. En este caso, A equivale 10; B, a 11; C, a 12; D, a 13; E, a 14; y F a 15.
Debido a que 2 es el único factor primo de 16, aquellas fracciones que no presentan una potencia de 2 en el denominador disponen de un desarrollo hexadecimal periódico. Por ejemplo: la fracción 1/3 en el sistema hexadecimal da como resultado 0,555555…
Así como en el sistema decimal pueden realizarse diversas operaciones, en el sistema hexadecimal también se pueden llevar a cabo distintas operaciones matemáticas. Los métodos, sin embargo, son diferentes.
Recurso para nombrar a los colores del modelo RGB
Desde hace ya muchos años, en cualquier ámbito relacionado con el diseño de imagen por ordenador se utiliza el sistema hexadecimal para especificar los colores. Un código hexadecimal de color, en este marco, permite expresar los valores correspondientes a cada uno de los tres componentes al espacio escogido; por lo general se trabaja con RGB, y por lo tanto se expresa un valor para el rojo, otro para el verde y otro para el azul.
Por convención, el código suele comenzar con el signo numeral (#), tras el cual se colocan seis dígitos que pueden ir del 00 al ff o, en sistema decimal, del 0 al 255. Dicho de otra manera, en cada uno de los tres valores podemos representar hasta 256 intensidades, ya que el cero también cuenta, aunque más no sea para indicar un valor nulo.
La cantidad total de colores que podemos representar con este tipo de código hexadecimal es 16 777 216, aunque en el habla cotidiana se suele redondear hacia abajo y mencionar simplemente como «dieciséis millones de colores» o, haciendo referencia al sistema binario y usando un término más técnico, «24 bits de color» (el número 24 responde a que 2 elevado a esta potencia da como resultado exactamente 16 777 216).
Cómo interpretar el código hexadecimal cromático
Entender un código hexadecimal de color no es difícil, aunque requiere ciertos conocimientos relacionados con la luz o bien un cierto grado de experiencia en el uso de herramientas digitales de pintura. Veamos algunos ejemplos básicos:
* el código #000000 representa el negro, ya que equivale a la ausencia de todo color o de luz;
* por el contrario, #ffffff es el blanco, que también se puede entender como la suma del rojo, el verde y el azul en su máxima intensidad;
* si pensamos en el espacio RGB, dado que la sigla se traduce como «rojo verde azul», entenderemos rápidamente que en un código hexadecimal los pares de dígitos pertenecen a cada uno de estos colores, si lo leemos de izquierda a derecha. Por esta razón, #ff0000 es el rojo más intenso, #00ff00 es el verde más intenso y #0000ff es el azul más intenso;
* al combinar dos colores obtenemos un tercero, como ocurre con el código #ff00ff, que representa el amarillo.