Lo primero que vamos a hacer para poder conocer el significado del término horóscopo es descubrir su origen etimológico. En este caso, tenemos que subrayar que deriva del griego. En concreto, es fruto de la suma de dos componentes léxicos de dicha lengua:
-El sustantivo “ora”, que puede traducirse como “hora”.
-El verbo “skopein”, que es sinónimo de “observar” o “mirar”.
Se trata de un concepto que hace referencia a una predicción realizada según la posición de los astros en un determinado momento.
El horóscopo, por lo tanto, es un método predictivo. La noción también se usa para nombrar al texto donde se plasman esos pronósticos y al gráfico que emplean los astrólogos para hacer un horóscopo de acuerdo a la representación del Zodíaco.
Para comprender qué es un horóscopo, primero es importante tener en claro a qué alude la idea de Zodíaco. Así se denomina a la zona cuyo centro es atravesado por la eclíptica y que abarca los doce signos que el Sol recorre a lo largo de un año (los signos del Zodíaco).
Se llama esfera celeste a una esfera ideal que resulta concéntrica a la esfera terráquea: en ella se desplazan aparentemente los astros. La eclíptica es el círculo que se forma por la intersección del plano de la órbita del planeta con la esfera celeste.
Retomando la noción de horóscopo, se trata de una predicción que realiza un astrólogo al observar la representación gráfica del Zodíaco, donde se muestran las posiciones de los astros en un momento dado (por lo general, el nacimiento de un individuo). Según quienes creen en la astrología, las personas nacidas bajo el mismo signo zodiacal comparten ciertas características y su destino está influenciado por idénticas fuerzas astrales.
Así, por ejemplo, teniendo en cuenta lo expuesto se establece que las personas que son Virgo destacan por ser perfeccionistas, serviciales, exigentes, muy modestas, observadoras y muy pacientes. Por el contrario, se viene a indicar que las personas que son Piscis destacan por ser bastante cambiantes, amables, muy despistadas, cariñosas e incluso poseen cierto grado de timidez.
Un astrólogo, en definitiva, al conocer el lugar, el día y la hora del nacimiento de alguien, puede elaborar un horóscopo interpretando el Zodíaco (las posiciones de los planetas, las estrellas y la Luna).
Es importante tener en cuenta que el horóscopo carece de sustento científico. Las coincidencias entre los pronósticos y la realidad son casuales pero, a través de un fenómeno psicológico, son más recordadas y valoradas que los numerosos errores del método.
Distintas son las obras culturales que toman el término que nos ocupa como elemento esencial de su título. Este sería el caso, por ejemplo, de la novela histórica “El Horóscopo”, que fue publicada en el año 1858 y que está escrita por el autor francés Alejandro Dumas.
La historia da comienzo en una famosa posada gala del siglo XVI donde varios personajes descansan y donde se toparán con una anciana que les predice el futuro a cada uno. Y lo que les indica no es nada favorable pues mientras que a algunos les advierte de que van a morir de forma próxima, como sería el caso del duque de Guisa o del mariscal de Saint-André, a otros les da a conocer que se van a convertir en asesinos.