La innovación tecnológica es el proceso que se lleva a cabo para diseñar y crear un nuevo servicio, producto o procedimiento, o mejorar los ya existentes, haciendo uso de la tecnología. De este modo, el resultado del trabajo supone una evolución o un avance.
Cabe destacar que la idea de innovación refiere a elaborar o modificar un bien para introducirlo en un mercado. Tecnológico, en tanto, es aquello vinculado a la tecnología: el conjunto de los conocimientos y las técnicas cuya aplicación permite aprovechar el saber científico de forma práctica.
Es importante subrayar que la innovación tecnológica, además de satisfacer necesidades de la población, contribuye a la generación de riqueza. Por eso es impulsada tanto por el Estado como por el sector privado.
Concepto de innovación tecnológica
La innovación tecnológica implica apelar a la ciencia y a la creatividad para idear artefactos o dispositivos novedosos o para optimizar el funcionamiento de los que ya existen. También puede hacer posible que un procedimiento empiece a desarrollarse con mayor eficiencia o velocidad.
Puede entenderse la innovación tecnológica como una evolución. Partiendo de un determinado punto, se va avanzando hasta que se logra concretar o materializar un progreso específico.
Por supuesto, aquello que se define como una innovación tecnológica depende de la época. En el siglo XV, cuando Johannes Gutenberg dio a conocer la imprenta, dicho aparato fue una gran innovación tecnológica. Hoy, en el siglo XXI, ya no lo es.
Del mismo modo, hoy consideramos que la realidad aumentada y la Internet de las cosas (IoT), por ejemplo, son innovaciones tecnológicas. Dentro de varias décadas, no serán novedosas e incluso puede ser que resulten anticuadas o vetustas.
Sus beneficios
La innovación tecnológica genera numerosos beneficios. Algunos de ellos recaen directamente en quienes consiguieron la innovación en cuestión, mientras que otros favorecen al conjunto de la sociedad.
Es habitual que la innovación tecnológica facilite el desarrollo de determinados procesos. De este modo, se gana en agilidad y flexibilidad y las acciones se realizan con más eficiencia.
Muchas veces la innovación tecnológica también ayuda a minimizar los costos. Esto se asocia de manera directa a la mayor eficiencia, que a su vez puede vincularse un mejor uso de los recursos.
Aquel que logró la innovación tecnológica, por otra parte, puede acceder a una mayor cantidad de consumidores o usuarios. En ocasiones incluso desembarca en nuevos mercados a través del avance que le permite diferenciarse de la competencia.
Tipos de innovación tecnológica
La innovación tecnológica puede clasificarse de distintas formas según sus características. Cuando lo nuevo supone un quiebre respecto al producto o servicio precedente, se habla de una innovación tecnológica radical. Este producto deriva en un cambio de prácticas: la gente deja de hacer las cosas de una forma y comienza a realizarlas de otra gracias a la innovación en cuestión. Un ejemplo es la cámara digital, que terminó desplazando a la cámara analógica, con lo cual las personas dejaron de revelar los rollos o películas y pasaron a almacenar las imágenes en computadoras (ordenadores) o teléfonos.
La innovación tecnológica disruptiva es similar, aunque sus consecuencias son aún más notorias o acentuadas. La creación del automóvil fue una innovación disruptiva: no solo forzó la desaparición de otros medios de transporte, sino que también introdujo actividades y costumbres hasta entonces inexistentes, abriendo nuevas posibilidades.
Una innovación tecnológica incremental, en cambio, añade alguna prestación a un elemento existente. Dicho cambio no deriva en procedimientos diferentes ni en dispositivos totalmente distintos.
Los avances en la actualidad
Actualmente existen diversos campos donde se han introducido o están en marcha innovaciones tecnológicas. En este sentido podemos mencionar a la inteligencia artificial, un campo de las ciencias de la computación que se orienta a la imitación o reproducción de las capacidades intelectuales humanas por parte de sistemas.
Mediante algoritmos, se logra que programas informáticos puedan aprender y resolver situaciones con una cierta autonomía, prescindiendo de una programación directa para tal fin. Con la inteligencia artificial por ejemplo, surgió la noción de big data: el procesamiento y el análisis automatizado de grandes cantidades de datos.
El machine learning o aprendizaje automático, en este marco, es una rama de la inteligencia artificial que posibilita que los sistemas aprendan de sus propias experiencias. Los alcances de esta innovación tecnológica ni siquiera pueden imaginarse.
Los chatbots y los asistentes virtuales son otros avances alcanzados con la inteligencia artificial. Los usuarios reciben asistencia personalizada al emplear estos recursos.
La computación en la nube es otra innovación tecnológica en pleno desarrollo. El llamado software as service (SaaS), con el cual el acceso al programa se realiza vía Internet, está vinculado a este campo.
Las criptomonedas con la blockchain también constituyen una innovación tecnológica en auge. A diferencia del dinero tradicional, se trata de un medio de intercambio digital que apela a la criptografía para garantizar la seguridad de las transacciones, con un control descentralizado.
Los coches autónomos, la impresión 3D, los drones y la telemedicina forman parte de las innovaciones tecnológicas ya establecidas pero con un amplio margen de crecimiento.