Interfijo es el afijo que se intercala entre la raíz y el sufijo. Esta noción se emplea en el ámbito de la gramática y también puede mencionarse como infijo, de acuerdo a lo aceptado por la Real Academia Española (RAE).
También se entiende como interfijo al afijo que no sucede ni precede al morfema léxico, sino que se posiciona en su interior, combinándose con otros sufijos derivativos y otros afijos.
Tomemos el caso del sustantivo “fealdad”. Este término tiene a “feo” como base léxica, a la cual se une el interfijo “al” y finalmente el sufijo derivativo “-dad”. Así se forma la palabra “fealdad”.
Afijo
Un afijo es un elemento lingüístico que se añade a una raíz o base de una palabra para formar una nueva palabra o modificar el significado de la misma. Los afijos son una parte fundamental de la morfología, que es el estudio de la estructura y formación de las palabras.
Existen diferentes tipos de afijos, que se clasifican según su posición con respecto a la raíz de la palabra. Además de los interfijos, los principales tipos de afijos son los siguientes:
- prefijos: se colocan antes de la raíz de una palabra y modifican su significado. Por ejemplo, en la palabra repetir, el prefijo re- indica repetición o volver a realizar una acción;
- sufijos: se añaden al final de la raíz de una palabra y también modifican su significado. Por ejemplo, en la palabra amoroso, el sufijo -oso indica cualidad o característica, convirtiendo el sustantivo amor en un adjetivo.
Los afijos pueden agregar información gramatical (como género, número, tiempo verbal, etc.), indicar relaciones entre palabras o incluso formar nuevas palabras. Su uso es muy frecuente en nuestro idioma. Es importante destacar que los afijos son elementos morfológicos, es decir, no pueden aparecer como palabras independientes, sino que siempre se unen a una base léxica para formar una nueva palabra.
Raíz y sufijo
La raíz es el componente central e invariable de una palabra que lleva su significado básico, mientras que el sufijo es un afijo que se agrega al final de una raíz para modificar su significado o formar nuevas palabras. Ambos elementos son esenciales para comprender la estructura y la formación de palabras en un idioma.
En lingüística, la raíz es el núcleo fundamental de una palabra que contiene su significado básico. Es el elemento principal y esencial que se mantiene constante a través de las diversas formas y derivaciones de una palabra. No puede descomponerse en partes más pequeñas significativas sin perder su sentido original.
Un sufijo es un tipo de afijo que se añade al final de una raíz para formar una nueva palabra o modificar el significado de la palabra existente. Los sufijos se utilizan ampliamente y pueden indicar diferentes categorías gramaticales, como sustantivos, adjetivos, adverbios o verbos, así como también pluralidad, género, tiempo verbal, entre otras cosas. Por ejemplo, en la palabra cantante, el sufijo -ante se añade a la raíz cant- para formar un sustantivo que indica «la persona que realiza la acción de cantar».
El interfijo se ubica en una posición específica en la palabra. En concreto, entre la raíz (el morfema léxico compartido por todas las palabras de un mismo grupo familiar, que generalmente enuncia un significado común) y el sufijo (el afijo que va después de la base).
Yákov Malkiel
De acuerdo al filólogo y etimólogo Yákov Malkiel, los interfijos carecen de función significativa o gramatical. Se trata de elementos átonos que se constituyen como enlaces entre la base léxica y los sufijos.
Para Malkiel, el interfijo de uso más habitual es “ar”. Dicho interfijo aparece en “bail-ar-ín” y en “espald-ar-azo”, por ejemplo.