El primer paso que vamos a dar para conocer el significado del término oído absoluto es descubrir el origen etimológico de las dos palabras que le dan forma:
-Oído, por un lado, deriva del latín, concretamente de “auditus”, que puede traducirse como “escuchado” y que, a su vez, procede del verbo “audire”, que es sinónimo de “escuchar”.
-Absoluto, por otro lado, también emana del latín. En su caso, de la palabra “absolutus”, que es el resultado de la suma de dos componentes léxicos: el prefijo “ab-”, que se usa para indicar “separación” o “privación”, y la palabra “solutus”, que es equivalente a “suelto”.
El oído absoluto es una capacidad auditiva. Así se denomina a la habilidad que permite reconocer la altura de un tono sin apelar a una referencia previa.
Cabe destacar que se llama oído al sentido que posibilita la percepción de los sonidos. Una persona con oído absoluto es aquella que puede identificar cualquier nota sin recurrir a otra nota referencial. Además tiene la posibilidad de producir una nota específica cantando pese a no tener referencias.
En la práctica, quienes tienen oído absoluto escuchan un sonido, generado por un instrumento musical o por cualquier otro elemento, y saben en qué nota suena. También detectan la tonalidad de las canciones.
Gracias a estas facultades, los individuos con oído absoluto presentan ventajas a la hora de componer o de ejecutar composiciones musicales. El oído absoluto le permite al artista detectar al instante si un instrumento está desafinado, por mencionar una posibilidad. Wolfgang Amadeus Mozart, Miles Davis, Ray Charles, Stevie Wonder, Michael Jackson, Freddie Mercury y Charly García son algunos de los músicos con esta particularidad.
Además hay que conocer que hay tres tipos de oídos absolutos: el activo, que hace que una persona pueda cantar una nota sin tener ninguna nota de referencia; el pasivo, que permite que pueda identificar una nota individual; y el muy fino. Este lleva a que la persona pueda reconocer una nota aunque esa esté ligeramente más baja o más aguda.
Respecto al origen del oído absoluto, hay expertos que le atribuyen una causa genética, vinculándolo al tamaño de la corteza auditiva. Otros estudiosos, en cambio, creen que el oído absoluto puede forjarse si el ser humano es preparado desde niño, sobre todo en la etapa de desarrollo del lenguaje.
Mientras el debate continúa, puede señalarse que es probable que exista una combinación de ambos factores: la genética y el ambiente. Posiblemente el oído absoluto sea una consecuencia de una predisposición innata acompañada por la estimulación adecuada.
Es importante diferenciar el oído absoluto de lo que es el oído relativo. Con este término se hace referencia no solo a la destreza que tienen los músicos para poder identificar lo que son los intervalos entre unas notas sino también al recurso que utilizan muchos cantantes para interpretar de forma adecuada una melodía empleando o continuando lo que se conoce como notación musical.
De la misma manera, hay que subrayar que si el oído absoluto es una cualidad o destreza que tienen solo algunas personas, el oído relativo es muy frecuente entre las personas que se dedican al mundo de la música.
