P2W es una expresión que proviene de la expresión inglesa pay to win, que puede traducirse como “pagar para ganar”. El concepto forma parte de la jerga que se emplea en el terreno de los videojuegos.
La idea de P2W está vinculada con el modelo de distribución conocido como F2P: free to play (“gratis para jugar”). A los contenidos F2P se puede acceder de forma gratuita; sin embargo, estos productos cobran a aquellos usuarios que desean conseguir ciertos elementos o recursos adicionales. Si ese pago incrementa las posibilidades de obtener una victoria, al juego se lo menciona como P2W.
Características de los videojuegos P2W
Puede decirse que P2W es un término que se utiliza de manera despectiva. La calificación es negativa ya que supone que los pagos inciden en el desarrollo de las acciones del videojuego, con lo cual se produce una distorsión.
Existe un consenso sobre la importancia de la igualdad de condiciones para todos los jugadores, independientemente del desembolso, o no, de dinero. Si un producto es F2P, se entiende que cualquier persona puede disfrutarlo sin pagar: si compra alguna prestación, la misma debería brindar una experiencia especial pero no cambiar las reglas de competencia.
Cuando se señala que el juego es P2W, se está haciendo hincapié en que es necesario pagar para alcanzar el éxito. Así, se pierde el carácter de gratuidad que en teoría deben mantener estas aplicaciones.
Búsqueda de rentabilidad
Hay que considerar que el sistema F2P es uno más de varios métodos de distribución. No implica que el desarrollador no pretende ganar dinero, sino que opta por una estrategia diferente a la de aquellos que cobran por el acceso.
Al optar por la distribución F2P, la empresa suele apuntar en una primera instancia a la masividad: si se puede jugar sin pagar, es probable que miles de individuos descarguen el juego o se conecten al mismo. Una vez que ya hay muchos jugadores, se les ofrece recursos extras a cambio de un pago. Eso permite a la compañía lograr ganancias.
El problema aparece cuando el dinero altera las chances de ganar y se pasa al esquema bautizado como P2W. Esa pretensión de ganancias del desarrollador afecta de manera directa a los jugadores que no pagan, que quedan en una posición de inferioridad.
Ejemplos de P2W
Supongamos que, en un juego de lucha, todos los usuarios tienen la posibilidad de elegir entre diez personajes. Sin embargo, quienes realizan un pago cuentan con la alternativa de optar por dos luchadores más, que presentan una fuerza superior y, por lo tanto, ganan con más frecuencia. Se puede afirmar, pues, que se trata de un juego P2W.
Tomemos ahora el caso de un entretenimiento digital de estrategia militar. Si quienes pagan consiguen ejércitos más preparados, con mayor armamento, la lógica indica que podrán imponerse a los que no gastan dinero. Es, por lo tanto, un videojuego P2W.
En ocasiones, la definición de P2W es motivo de debate. Determinar qué prestación constituye una verdadera ventaja puede resultar complejo e incluso tiene que ver con la subjetividad del usuario.