Un polígono de frecuencia es una clase de gráfico que se crea a partir de un histograma de frecuencia. Estos histogramas emplean columnas verticales para reflejar frecuencias: el polígono de frecuencia es realizado uniendo los puntos de mayor altura de estas columnas.
Por lo tanto, podríamos establecer que un polígono de frecuencia es aquel que se forma a partir de la unión de los distintos puntos medios de las cimas de las columnas que configuran un histograma de frecuencia. Este se caracteriza porque utiliza siempre columnas de tipo vertical que se ubican una al lado de la otra, sin que existan espacios entre ellas.
Los histogramas se emplean tanto en las ciencias sociales como en las ciencias naturales, siendo especialmente importantes en las ciencias económicas ya que se emplean para analizar estadísticas y llevar a cabo la comparación de los resultados de un proceso determinado.
Tipos de polígono de frecuencia
Se conoce como polígonos de frecuencia para datos agrupados a aquellos que se desarrollan mediante una marca de clase que tiene coincidencia con el punto medio de las distintas columnas del histograma.
En el momento de la representación de todas las frecuencias que forman parte de una tabla de datos agrupados, se genera el histograma de frecuencias acumuladas que posibilita la diagramación del polígono correspondiente (es decir, del polígono de frecuencias acumuladas).
Cómo crearlos
Dado el valor y la utilidad que tienen los polígonos de frecuencia hay que resaltar que estos se pueden confeccionar de una manera muy sencilla y rápida. En concreto, se da la oportunidad de acometerlos mediante un programa informático que se ha convertido en uno de los ejes claves del funcionamiento de cualquier empresa: nos estamos refiriendo al software conocido como Excel.
Este es un programa, incluido en el paquete de ofimática Microsoft Office, que se creó para que sus usuarios pudieran trabajar con hojas de cálculo. Por tal motivo, es lógico que también permita la posibilidad de crear polígonos de frecuencia a la hora de comparar cifras y tomar decisiones en base a las mismas.
Para conseguir crear polígonos de frecuencia con Excel se tiene que partir de la existencia de una serie de gráficos que se hayan confeccionado previamente para luego desarrollar un conjunto de acciones que den lugar al desarrollo del polígono en cuestión.
Más allá de Excel, se puede emplear otra clase de software estadístico para la visualización de datos y la generación de los polígonos. Estas herramientas, al final y al cabo, automatizan aquellos pasos que también pueden llevarse a cabo a mano en una hoja.
Ejemplos de polígono de frecuencia
Un polígono de frecuencia, por ejemplo, permite reflejar las temperaturas máximas promedio de una ciudad en un determinado periodo temporal. En el eje X (horizontal), deben indicarse los meses del año (enero, febrero, marzo, abril, etc.). En el eje Y (vertical), en cambio, se registran las temperaturas más altas promedio de cada mes (28º, 26º, 22º…). El polígono de frecuencia se creará al unir, mediante un segmento, las diversas temperaturas más elevadas promedio.
Supongamos que las autoridades sanitarias de una ciudad deciden llevar a cabo un estudio para examinar la nutrición de los niños que asisten a la escuela primaria. La intención es obtener información sobre el sobrepeso o el bajo peso de los alumnos para luego del análisis de datos tomar las medidas que correspondan. Así, en el eje X se menciona el peso de los estudiantes (hasta 25 kg; 26 a 30 kg; 31 a 35 kg, etc.), mientras que en el eje Y se anota el número de niños que corresponde a cada intervalo o rango según lo registrado en la balanza o báscula (30, 42, 168, 84…). La creación del polígono de frecuencia se da uniendo las cimas.
Veamos otro ejemplo. Una consultora realiza una encuesta sobre cuánto tiempo de viaje tiene la población que vive en un determinado barrio desde que salen de su casa hasta que llegan al lugar de trabajo. Para desarrollar el estudio, toman una muestra de 100 mujeres y hombres: en el eje X señalan el tiempo (menos de 15 minutos; entre 15 y 30 minutos; entre 30 y 45 minutos; entre 45 minutos y una hora; y más de una hora) y en el eje Y, la cantidad de vecinos correspondiente a cada conjunto o categoría (9, 39, 35, 12, 5). Uniendo con una línea las cimas de las columnas del histograma, en definitiva, se establece el polígono de frecuencia.
Hay que destacar que los polígonos de frecuencia pueden usarse cuando se pretende retratar varias distribuciones distintas o la clasificación cruzada de una variable cuantitativa continua con una cualitativa o cuantitativa discreta en el mismo dibujo.
El punto de más altura de un polígono de frecuencia equivale a la mayor frecuencia, mientras que el área que se sitúa debajo de la curva incluye todos los datos que existen. Cabe recordar que la frecuencia es la repetición mayor o menor de un evento, o el número de veces que un acontecimiento periódico se reitera en una unidad temporal.