Radar es un término que procede de un acrónimo inglés: Radio detecting and ranging («Detección y localización por radio»). Se trata de un sistema que, a través de radiaciones electromagnéticas, permite detectar la localización o la velocidad de un objeto. La noción de radar también se emplea para nombrar al aparato que aplica este sistema.
Por ejemplo: «El radar del ejército detectó un avión sospechoso que volaba sin autorización sobre el río Bautista», «De acuerdo al radar de la policía, el automóvil circulaba a 180 kilómetros por hora», «El aeropuerto cuenta con ocho radares para controlar el tráfico aéreo«.
Lo que hace el radar es emitir ondas electromagnéticas que se reflejan en el objetivo y se reciben en la misma posición del emisor. Esa especie de eco permite procesar diversas informaciones, como distancias, velocidades, altitudes y direcciones de objetos móviles o estáticos.
Tipos de radares
Los radares se pueden clasificar haciendo uso de una gran variedad de criterios para ello. Así, por ejemplo, entre las propuestas más significativas se encuentran las siguientes:
- Si se tiene en cuenta lo que es la forma de la onda, se pueden dividir en tres grupos: de onda continua con modulación, de onda continua y de onda pulsada.
- En el caso de que se tenga en consideración lo que es el número de antenas, se pueden clasificar en tres tipos: multiestático, monoestático y biestático.
- Es posible clasificar al radar de otras muchas maneras según otras variables. De esta forma puede hablarse de radares secundarios, de seguimiento o de búsqueda, entre otros.
Sus usos
Los radares tienen múltiples usos. Pueden ser utilizados por las fuerzas armadas para conocer la posición y los movimientos de diversos blancos; por la policía para medir la velocidad con que circulan los automóviles por una carretera; por la seguridad aeroportuaria para dar indicaciones a los aviones y evitar las colisiones; por el capitán de un barco para guiarse en alta mar; o por el servicio meteorológico para detectar precipitaciones, entre otras utilizaciones.
En la actualidad, el tipo de radar que más se suele utilizar y que afecta a la población de a pie es el radar que se emplea para llevar a cabo lo que son los controles de velocidad. En España, la DGT (Dirección General de Tráfico) es la que se encarga de proceder a establecer esos citados radares por las distintas provincias.
Sin embargo, hay que decir que esos radares tienen «enemigos». Y es que de cara a evitar que los conductores sean multados han llegado incluso a surgir apps que avisan de donde están situados los correspondientes radares de tráfico.
Radar social
No podemos pasar por alto tampoco que, a raíz del avance de las redes sociales, se han dado forma a los llamados radares sociales. Básicamente estos son los mecanismos que se pueden emplear para conocer el seguimiento que un evento, personaje o elemento está teniendo.
Así, por ejemplo, podríamos destacar que los conocidos como hashtags de Twitter sirven para conocer cuándo un programa de televisión está teniendo repercusión y seguimiento.