Reajuste es el procedimiento y el resultado de reajustar. Este verbo se refiere a realizar un nuevo ajuste, por lo general de algún tipo de precio.
Por ejemplo: “Debido al incremento de los impuestos, nos vemos obligados a realizar un reajuste de nuestras tarifas”, “El reajuste de las tasas es imprescindible para estar a tono con la nueva coyuntura económica”, “El gobernador aseguró que no habrá otros reajustes y pidió llevar tranquilidad a la población”.
Ejemplos de reajuste
El significado del concepto está vinculado a una variación repetida de valores. La primera vez que se modifica un valor se habla de ajuste (“Vamos a tener que negociar un ajuste del contrato”). Si, tiempo después, se produce una nueva modificación, a dicho cambio se lo conocerá como reajuste. Esto quiere decir que se alteran las cifras que se habían fijado a través del primer ajuste.
Supongamos que una empresa ofrece un servicio de conexión a Internet por un precio de 50 dólares mensuales. Tiempo después, la compañía decide modificar el precio: el servicio ahora pasa a ofrecerse por 60 dólares al mes. Se trata, por lo tanto, de un ajuste. Sin embargo, debido a la inflación, la empresa toma la decisión de volver a incrementar el precio, hasta los 80 dólares mensuales. En este caso, la firma habrá decidido un reajuste de sus tarifas.
En el campo de la economía y las finanzas también se emplea el término que nos ocupa. En concreto, se habla de reajuste para referirse a las variaciones que sufren los tipos de cambio que establecen y acuerdan los países.
Más allá de precios y valores
En ciertas ocasiones, la noción de reajuste no se vincula a un precio, sino a otro tipo de cuestiones que, de alguna forma, también pueden cuantificarse. Una organización puede realizar un reajuste de sus puestos laborales cuando pretende eliminar algunos de ellos, algo que se traduce en despedidos. Si la empresa tiene 5.000 empleados y despide a 45 trabajadores, habrá hecho un reajuste de su plantilla laboral.
Además de todo lo expuesto, no podemos olvidarnos de lo que se dio en llamar reajuste de las sibilantes del idioma español. Durante el periodo comprendido entre los siglos XVI y XVII fue cuando se produjo este proceso de evolución de la fonética del castellano. Resultado del mismo fue el actual sistema de consonantes de dicha lengua.
Durante ese tiempo se acometieron distintas actuaciones que se enmarcaron en tres grandes etapas:
- Una primera en la que se procedió a darle prioridad a las sordas frente a las sonoras.
- Un segundo momento en el que la consonante predorsodentoalveolar africada sorda pasó a ser de clase fricativa.
- Una tercera fase en la que aparece el sonido velar y en la que aparecen los sonidos de la J y de la G.
Película «Reajuste matrimonial»
Dentro del ámbito del cine, nos encontramos con diversas películas que utilizan la palabra que nos ocupa en su título. Este sería el caso, por ejemplo, de “Reajuste matrimonial”. Se trata de una producción estadounidense de 1962, dirigida por George Roy Hill y protagonizada por Jane Fonda y Anthony Franciosa.
Cuenta la historia de un veterano de la guerra de Corea que decidirá contraer matrimonio con una enfermera que conoció durante el tiempo que estuvo ingresado en el hospital intentando recuperarse de una crisis.