La respiración aerobia es una modalidad de metabolismo en la cual se necesita que el oxígeno tenga intervención. Cabe destacar que la respiración consiste en intercambiar gases con el ambiente, un proceso que puede llevarse a cabo de distintas formas según el ser vivo en cuestión.
El concepto de respiración aerobia o aeróbica tiene su origen etimológico en el latín y en el griego. Partiendo de esta premisa podemos establecer que está formado por dos palabras. La primera de ellas, respiración, se compone de tres partes latinas: el prefijo re– que puede traducirse como «repetición»; el verbo spirare que equivale a «soplar»; y el sufijo –ción que es sinónimo de «acción».
La segunda palabra, aerobia, como decíamos anteriormente procede del griego. En este caso emana de la unión de aero, que significa «aire», y de bio que hace referencia a «animal». Este adjetivo se utiliza en el campo de la biología para hacer mención a aquel que requiere oxígeno para subsistir. Lo que guarda relación con los organismos clasificados como aerobios se conoce como aeróbico.
Características de la respiración aerobia
Por medio de la respiración aerobia, los seres vivos obtienen energía de las moléculas orgánicas, donde el carbono es oxidado y el oxígeno es empleado como oxidante. Cuando el oxígeno no funciona como oxidante, se habla de respiración anaerobia o anaeróbica.
En la respiración aerobia, el oxígeno logra atravesar las membranas biológicas (en primera instancia la membrana plasmática y después las membranas mitocondriales) hasta unir electrones y protones para formar átomos de hidrógeno y, a través de ellos, agua. El ácido pirúvico que se obtiene en la primera fase de la anaerobia es oxidado con el oxígeno para aportar además energía y dióxido de carbono.
Distintas etapas
Es posible dividir la respiración aerobia en distintas etapas. La primera fase se conoce como glucolisis y surge cuando la molécula de glucosa se oxida y se divide en un par de moléculas de ácido pirúvico.
La segunda etapa se conoce como descarboxilación oxidativa del ácido pirúvico. En este periodo, el ácido pirúvico entra en la matriz de la mitocondria, donde el complejo enzimático piruvato deshidrogenasa se encarga de procesarlo.
La respiración aerobia continúa con el denominado ciclo de Krebs (caracterizado por la oxidación de los acetilos que transporta el acetil coenzima A, procedentes del piruvato), la cadena respiratoria y la fosforilación oxidativa.
Respiración aerobia vs. respiración anaerobia
En contraposición a este tipo de respiración, y para evitar cualquier tipo de confusión, hay que subrayar que se encuentra la conocida como respiración anaeróbica o anaerobia. Esta puede definirse como aquel proceso en el que el oxígeno no es requerido pues son utilizadas otro tipo de sustancias tales como el nitrógeno o el sulfato. Un hecho este que es precisamente el que marca la más absoluta diferencia con la respiración aerobia.
Así, mientras que un ejemplo de aerobia podría ser la que llevan a cabo los seres humanos pues necesitan el oxígeno para vivir, una muestra de anaeróbica sería la que desarrollan diversos tipos de bacterias.
Las bacterias que pueden ocasionar enfermedades que ocasionan la muerte de las personas u otras que propician la aparición del botulismo o del tétanos, por ejemplo, son las que tienen este citado tipo de respiración.