Los indicadores sociodemográficos brindan información sobre una cierta situación social.
El adjetivo sociodemográfico no forma parte del diccionario de la Real Academia Española (RAE). Es posible comprender su significado, sin embargo, prestando atención a los términos que permiten su desarrollo.
Social alude a aquello vinculado a la sociedad: el conjunto de individuos que viven en un mismo territorio y respetan normas en común. Lo demográfico, en tanto, se asocia a la demografía, que es el estudio de un grupo humano desde una perspectiva estadística, centrado en su evolución o en un periodo específico.
TemasLos indicadores sociodemográficos
Un indicador sociodemográfico, de este modo, es un dato que refleja una situación social. Esta información puede obtenerse mediante encuestas, censos o cifras registradas de distintas maneras por organismos estatales.
Puede decirse que lo sociodemográfico refiere a las características generales y al tamaño de un grupo poblacional. Estos rasgos dan forma a la identidad de los integrantes de esta agrupación.
Es importante señalar que estos indicadores pueden afectar la sensibilidad de las personas que no se identifican con los valores binarios se género («hombre» o «mujer»), a menos que las encuestas contemplen todas las variables reconocidas hasta el momento. Ya sea una persona transgénero o no binaria, entre otras posibilidades, en muchos países aún no existe una aceptación de su libertad, y se ven forzadas a registrar sus datos en un sistema cerrado que no las representa en absoluto.
Targeting sociodemográfico
La edad, el género, la actividad laboral y el nivel de ingresos, por ejemplo, son datos sociodemográficos. Desde el marketing, por mencionar un caso, se analizan este tipo de cuestiones para el denominado targeting sociodemográfico, que sirve para crear una publicidad en base a estos criterios y así alcanzar con éxito al grupo objetivo.
Este análisis es crucial para la mayoría de las campañas publicitarias y, por lo tanto, de los productos y servicios de las empresas que pretenden alcanzar una gran visibilidad. Lejos han quedado los días de los pequeños comerciantes que colocan en sus estanterías los productos que «saben» sus clientes comprarán: al día de hoy ni siquiera basta con el hecho de que un producto sea de primera necesidad, ya que el gran volumen de competencia vuelve imperioso atraer al consumidor por otros medios, y para ello hay que conocerlo a fondo.
Perfil sociodemográfico
Un perfil sociodemográfico, por otro lado, se traza en base a los conocimientos obtenidos sobre la situación social y la demografía de un conjunto de personas. El perfil sociodemográfico de los estudiantes de una determinada carrera universitaria, por mencionar una posibilidad, arroja una edad promedio, revela dónde residen la mayoría de los alumnos, señala si predominan los que trabajan o los que solamente estudian, etc.
El género y la edad son datos sociodemográficos.
Podríamos decir que el perfil sociodemográfico es un análisis complementario al targeting, o al menos que sirve para estudiar la situación desde el punto de vista contrario. Mientras que éste parte de un mercado o una actividad y se enfoca en descubrir quiénes son sus clientes, el anterior intenta averiguar quiénes podrían serlo para luego moldear su oferta.
Puestas en conjunto, ambas tácticas pueden usarse a lo largo de los años para mantener una compañía en una buena posición dentro del mercado: antes de lanzar una oferta innovadora o sin precedentes, conviene el targeting sociodemográfico; luego de un tiempo en circulación, gracias a la elaboración del perfil es posible saber si el público interesado se condice con la estimación anterior. Comparando ambos resultados, y a través de su repetición cíclica, es posible ajustar los productos y servicios para conseguir un éxito mayor cada año.
