El diccionario de la Real Academia Española (RAE) define la somatología como el estudio de los componentes sólidos del cuerpo del ser humano. Se trata de un área de la antropología física o biológica.
Estructura y desarrollo corporales
La somatología se dedica al análisis de la estructura corporal humana y de su desarrollo. Entiende al individuo como un ser biológico resultante del proceso evolutivo, con lo cual examina a las personas a partir de la relación que establecen con la cultura y con el medio ambiente.
Los expertos en somatología desarrollan acciones como la evaluación visual (conocida como somatoscopía) y la medición (somatometría) del cuerpo, centrándose en la población viva. Las variaciones de los resultados obtenidos posibilitan la tipificación y el desarrollo de agrupaciones de acuerdo a las características similares. Un somatotipo, en este marco, es un cuerpo con ciertos rasgos que lo hacen especialmente apropiado para una actividad en particular.
Somatometría
El concepto de somatometría se define como el grupo de técnicas que permiten hacer una precisa medición del cuerpo del ser humano. Se puede centrar en las formas anatómicas, midiéndolas y comparándolas entre sí, de seres vivos o cadáveres. Su aplicación se da en cualquier ciencia que tenga como objeto de interés la morfología de las regiones anatómicas; entre ellas están la paleontología, la antropología y la biología.
Más precisamente, la somatometría se contextualiza en la antropología física, como una parte de esta rama de la antropología que se enfoca en medir el cuerpo de nuestra especie. Algunas de las propiedades específicas que interesan a esta disciplina de la somatología son la talla, el peso y el índice de masa corporal. En un examen clínico no puede faltar la somatometría, junto con la medición del pulso, la temperatura, la presión arterial y la respiración, los denominados signos vitales, ya que solamente se detectan en individuos vivos.
En el ámbito clínico, se considera una práctica conveniente desviar los parámetros que se enmarcan en los márgenes de la normalidad; si cambian, es posible que estemos en presencia de un factor de riesgo que se vincule con patologías. No es raro que éstas mofifiquen de alguna manera los mencionados signos vitales, de manera que con una prueba tan sencilla se pueden evitar graves complicaciones y comenzar a tratar los problemas cuando todavía existen más probabilidades de resolverlos.
Somatoscopía
La somatología nos demuestra, por medio del estudio de las poblaciones, que la evaluación visual es tan importante como la medición física, razón por la cual la somatoscopía es esencial para obtener una observación completa. Estudiar las variaciones por medio de esta disciplina nos permite encontrar semejanzas y agrupar en tipos a las poblaciones.
A su vez, al clasificar de manera tipológica a los seres humanos podemos advertir ciertas tendencias en común de acuerdo con su región geográfica, que a su vez acarrean otras, dentro de ámbitos tan dispares como la cultura y la economía. Aquí también entran en juego la genética y los lazos sociales, aunque desde un punto de vista científico es necesario hallar métodos fiables y posibles de reproducir.
Cuerpo y emociones
Es importante indicar que también se llama somatología a la investigación sobre el vínculo existente entre el cuerpo y las emociones. Una enfermedad, así, puede aportar información sobre el estado psicológico de un sujeto.
Dicho de otra manera, la somatología indaga en las causas espirituales y psicológicas de las afecciones corporales. Hay ramas de la psicología que se basan en la somatología para sostener que los síntomas pueden ser una expresión física de un problema psíquico.
Somatización
Cabe resaltar que el término somatizar refiere a la transformación involuntaria de un conflicto psíquico en un síntoma orgánico (somático). A dicho proceso y a su resultado se lo denomina somatización.