Una úlcera es una lesión abierta que incluye pérdida de sustancia en los tejidos orgánicos.
Una úlcera es una lesión abierta con pérdida de sustancia en los tejidos orgánicos, que suele aparecer acompañada por la secreción de pus. La úlcera carece de capacidad de cicatrización espontánea y está sostenida por causas internas o un vicio local.
Otra definición se refiere al término úlcera, procedente del latín ulcera (plural de ulcus), como la solución de continuidad o rotura de una superficie epitelial del organismo, que puede ir acompañada de una inflamación y/o infección.
TemasÚlcera por presión
Se conoce como úlcera por presión al daño localizado en la piel a causa de la presión, fricción o roce. Es común que este tipo de llagas aparezca en las prominencias óseas (como los talones o caderas) y que se desarrolle en personas inmóviles. Al estar todo el día en cama, el tejido se daña y se produce la úlcera.
De acuerdo a su gravedad, la úlcera por presión puede calificarse de primer grado (con la piel enrojecida), segundo grado (la piel se agrieta y se forman vesículas), tercer grado (pérdida de continuidad de la piel y aparición de necrosis) o cuarto grado (la úlcera necrótica alcanza al músculo, los nervios y los huesos).
Otros tipos
La úlcera péptica, por otra parte, afecta a la mucosa que recubre el duodeno o el estómago. Este trastorno es causado por la bacteria Helicobacter pylori y sus síntomas son acrecentados por el ácido, los alimentos picantes y las tensiones, entre otros factores.
Las aftas, por último, son úlceras mucosas que aparecen como pequeñas llagas en la mucosa oral y que se encuentran rodeadas de una zona de eritema.
Suele decirse que el jugo de la col blanca contribuye al tratamiento de ciertas úlceras.
Tratamiento natural de la úlcera
Se ha comprobado que el jugo de la col blanca es un efectivo remedio contra la úlcera estomacal e intestinal; además, ayuda a los pacientes de alcoholismo con los típicos problemas estomacales y hepáticos que deben enfrentar. Algunos de los estudios médicos que han dado lugar a estas conclusiones datan de comienzos de los los años 60 y entre las razones se encuentra la presencia de aminoácidos azufrados y el factor U.
Ya a mediados del siglo pasado, el médico norteamericano Garnett Cheney indicaba a sus pacientes de tuberculosis que bebieran alrededor de 1 litro de jugo de col blanca crudo al día, repartido en cuatro o cinco dosis. Según su observación, bastaba un plazo de cinco días para que los dolores desaparecieran y tan solo una quincena para que las úlceras se curaran. Cabe mencionar que fue el propio Cheney quien habló por primera vez del factor U.
Comparando este tratamiento con los tradicionales, su duración es un 33% menor en el caso de la úlcera gástrica y un 83% menor cuando se combate una úlcera duodenal. A raíz del éxito de la col blanca, se crearon diferentes medicamentos, tales como tabletas, basados en su factor U.
En la India, un grupo de investigadores descubrió que el proceso regenerativo de la curación de úlceras dependía directamente del nivel de las mucinas estomacales, proteínas ricas en carbohidratos y el elemento fundamental de la muscosa que protege el tejido estomacal. A partir de dicho hallazgo, identificaron en la col blanca una serie de sustancias equivalentes a las mucinas estomacales, lo cual ayudó a explicar su eficacia en este contexto.
La hoja de col blanca tiene la propiedad de estimular las células de las paredes estomacales que se encargan de generar la secreción mucosa que protege al órgano del ácido. En su composición encontramos las vitaminas C y K, selenio y ácido fólico que, en conjunto, ayudan a la mejora de las defensas antioxidantes del cuerpo, a prevenir la pérdida de sangre y a una correcta cicatrización de la piel. Por otro lado, la col blanca es un efectivo bactericida y resulta útil en la expulsión de gusanos del intestino.
