Definición de

Cookie

Galleta

Las cookies pueden prepararse en el hogar o comprarse en confiterías y pastelerías.

Cookie es una noción que pertenece a la lengua inglesa y puede traducirse como «galleta». En nuestro idioma, el término puede usarse en el terreno de la gastronomía o relacionado a Internet.

Su utilización gastronómica, por supuesto, no es indispensable, ya que se puede hacer referencia a una galleta, galletita o bizcocho. Por eso, emplear el concepto inglés carece de sentido. De todos modos, por cuestiones de estilo o idiosincrasia, en ocasiones se habla de cookies de chocolate, cookies de limón, cookies de avena, cookies de naranja, cookies de manteca o mantequilla, etc.

Si tienes poco tiempo, revisa el índice o el resumen con los puntos clave.

Si bien existen un sinfín de recetas de cookies, como de casi cualquier otro plato que haya alcanzado una cierta popularidad a nivel mundial, una de las características que suelen destacar de su aspecto es su consistencia arenosa. A simple vista, por lo tanto, no se ve rígida ni de textura suave, sino fácil de trocear y con una superficie porosa.

Dependiendo de los gustos de cada persona, esto las vuelve especialmente tentadoras, ya que son fáciles de comer y permiten disfrutar su sabor y el de los demás ingredientes, como pepitas de chocolate, almendras, avellanas o pasas de uva.

Su elaboración

Para elaborar cookies, se debe realizar la mezcla de los ingredientes (que pueden incluir, entre muchos otros, azúcar, cacao, canela, extracto de vainilla, harina, leche y huevo), pudiéndose usar batidora si es necesario. Una vez obtenida la masa, se puede usar un rodillo para aplanarla y luego cortarlas con la forma deseada.

El siguiente paso es colocarlas en una bandeja de horno para, justamente, hornearlas. Lo habitual es que se utilice el horno a temperatura media. Completada la cocción, las cookies deben enfriarse antes de consumirlas en el desayuno o la merienda o como postre.

Repostería

Una cookie o galleta de mantequilla (manteca) puede llevar sprinkles, también llamados pepitas o chispitas.

En el contexto de la tecnología, una cookie es un archivo que envía un sitio web y que se almacena en el navegador web de la persona que está usando Internet. Este archivo permite que el sitio rastree la actividad que se realizó anteriormente en el navegador.

Gracias a una cookie, se puede conocer el historial de navegación del usuario. Por lo tanto implica, en cierto modo, una violación de la privacidad del individuo. Esto hace que muchos sitios adviertan sobre estas cuestiones y pidan al internauta su consentimiento de cookies, aprobándolas o rechazándolas: incluso esta advertencia es obligatoria en algunas regiones.

Más allá de la cuestión de la política de privacidad, las cookies resultan útiles para recordar el acceso a un servicio. Cuando el sitio «descubre» que el usuario registra una visita previa, puede presentarle anuncios personalizados o reconocer su nombre de usuario y su contraseña, por ejemplo.

Cabe destacar que la persona tiene la posibilidad de aceptar cookies o rechazar cookies, ignorarlas desde la configuración del navegador o recurrir a un bloqueador de cookies. Incluso puede eliminarlas una vez aceptadas. Además, como ya mencionamos, actualmente en ciertos lados es obligatorio ofrecer al individuo la posibilidad de aceptar tan sólo algunas de las cookies -las que se ajusten a sus necesidades de privacidad o seguridad-, rechazando aquellas que no le brindarían ningún beneficio. Eso sucede con la Ley de Cookies de la Unión Europea (UE).

Privacidad online

Las regulaciones de privacidad en Internet suelen orientarse al funcionamiento de las cookies.

Clasificación según el tipo

Hasta no hace mucho tiempo, se hablaba de cookies en general, sin ahondar en su clasificación. Sin embargo, dado que al día de hoy el usuario tiene un grado importante de control sobre su almacenamiento y la gestión de sus datos personales, los sitios web las presentan en detalle, explicando el tipo y la función de cada una. A grandes rasgos, la primera distinción podemos hacerla entre las temporales y las permanentes.

Sus nombres son bastante claros: las temporales se borran una vez que abandonamos el sitio; las cookies persistentes o permanentes, por otro lado, persisten por tiempo indeterminado o durante unos meses, ya que pueden incluir una fecha de caducidad. Otra clasificación diferencia entre las cookies propias (creadas por el propio sitio) y las cookies de terceros (solicitadas por otros, generalmente empresas de servicios).

Las cookies que no podemos desactivar si deseamos mantenernos en un sitio y aprovechar sus prestaciones son las técnicas. Entre sus utilidades se encuentra el control del tráfico, la administración de la seguridad en procesos de compra y el almacenamiento de las preferencias del usuario para compartir datos en las redes sociales.

Hay otro tipo de cookies que facilitan la experiencia del usuario a través de todos los sitios que visita: las cookies de preferencias o de personalización. Por ejemplo, el idioma, el navegador favorito o la ubicación geográfica.

Los cookies de funcionalidad, las cookies de análisis, las cookies de publicidad, las cookies de rendimiento, las cookies de sesión y las cookies seguras son otras clases de cookies. Cada destacar que ciertos archivos pueden formar parte de más de un conjunto (una misma cookie puede ser propia y de funcionalidad, por mencionar una posibilidad).

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Cómo citar este artículo Publicado por Julián Pérez Porto y Ana Gardey. Actualizado el 31 de agosto de 2023. Cookie - Qué es, definición, características y clasificación. Disponible en https://definicion.de/cookie/
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