Customizar es un verbo que no forma parte del diccionario de la Real Academia Española (RAE) pero que, sin embargo, tiene un uso bastante frecuente en nuestra lengua. Se trata de una adaptación del término inglés customize, que refiere a modificar algo de acuerdo a las preferencias personales.
Puede decirse, por lo tanto, que customizar un objeto es lo mismo que personalizarlo (adaptarlo a nuestro gusto). La noción de customizar es frecuente en el ámbito de la moda y de la indumentaria, aunque también se utiliza en el marketing.
Ejemplo de customizar
Supongamos que una joven diseñadora compra una camisa de color rosado. Esta prenda no tiene ningún dibujo ni detalle decorativo, sino que es una prenda totalmente rosa. La diseñadora, sin embargo, decide customizarla: le añade un moño, pinta unos lunares y le recorta las mangas.
De esta manera, su camisa customizada será un producto único y exclusivo, imposible de conseguir en otra parte ya que lo modificó con un trabajo artesanal y personal.
Prácticas habituales vinculadas a la ropa
Customizar la ropa, para así transmitir en ella la personalidad y la filosofía propia al tiempo que alejarse de las tendencias que imperan en cada momento, es algo que cada vez hacen más personas.
De ahí que se hayan dado a conocer multitud de trucos para poder acometer la customización de los pantalones, las faldas, los vestidos o las camisetas. En concreto, entre los más conocidos se encuentran los siguientes:
• Estampar las camisas o tops con marcas personales identificativas.
• Hacerse, por ejemplo, cintas para el pelo utilizando las mangas de cualquier camiseta que ya no se usa.
• Coserle o pegarle tachas a las sudaderas.
• Estampar pantalones o faldas.
• Recortar los cuellos de las camisetas.
• Añadirle detalles de encaje a las camisas, a los bajos de los vestidos o a las faldas.
Customizar el hogar
En muchos casos, lo que se hace es customizar la ropa que está vieja. De esta manera, se evita tener que invertir dinero en adquirir prendas nueva, lo que supone un notable ahorro económico.
Con este último objetivo, también es frecuente que se lleve a cabo lo que sería la customización de los muebles del hogar. Así, muchas son las personas que recurren a someter a este proceso al mobiliario antiguo o bien al básico y económico que han adquirido en una gran superficie.
Con esta acción consiguen renovar la decoración de la casa y todo gracias a procesos tales como un cambio en el color de la pintura, realización de incrustaciones y estampados en las lámparas o en los armarios…
Personalización de sitios web y vehículos
Otro ejemplo de customizar puede encontrarse en el caso de un estudio de diseño web que trabaja en base a plantillas prediseñadas. Esta empresa exhibe unas plantillas básicas a sus clientes, quienes escogen la que más les gusta y encargan a los diseñadores diversas modificaciones. El estudio, por lo tanto, customizará la plantilla según estos requerimientos.
En el caso de los coches y de las motocicletas, la acción de personalizar el vehículo se conoce como tuneo (del inglés tuning) y no como customizar, aunque ambos conceptos son similares.