La idea de deflexión, procedente del vocablo latino deflexio, se emplea en el terreno de la física para nombrar al acto de desviar la dirección de una corriente o de un fluido. Esta es la definición aportada por el diccionario de la Real Academia Española (RAE), aunque el concepto tiene varios usos.
En el ámbito de la ingeniería, se conoce como deflexión a la deformación que registra un elemento a partir de la aplicación de una fuerza. La deflexión, en este marco, se genera por una flexión interna.
Es posible calcular la deflexión de acuerdo a las leyes que vinculan las fuerzas y los desplazamientos a través de un método geométrico o de energía. La deflexión es una respuesta estructural ante las aplicaciones de cargas.
El concepto de respuesta estructural se ubica en el ámbito del análisis estructural, es decir, la aplicación de las ecuaciones de resistencia de materiales (la disciplina de varios campos de la ingeniería que se dedica al estudio de la mecánica de sólidos deformables por medio de modelos simplificados) para hallar los esfuerzos internos (también llamados esfuerzos de sección, se trata de magnitudes físicas usadas para calcular piezas prismáticas, láminas y placas), las tensiones y las deformaciones que afectan directamente una estructura resistente, como ser esqueletos o edificaciones.
En este marco, es posible estimar las deflexiones haciendo uso de diferentes métodos de cálculo, algunos de los cuales son los siguientes:
* de trabajo real: se trata del método que aprovecha el principio de conservación de energía, el cual asegura que el total de energía en todo sistema físico que se encuentre aislado no varía con el tiempo, aunque la misma puede cambiar de forma. La energía que produce el trabajo externo debe ser igual a la del interno que deforma el producto a causa de los esfuerzos que generan las cargas. Este método se limita al análisis de una sola incógnita;
* de Castigliano: es la derivada parcial de la deformación elástica, en función de la fuerza. La base de este método usado para estimar las deflexiones se halla en los teoremas de Castigliano, creados por el ingeniero italiano Carlo Alberto Castigliano en el siglo XIX;
* de trabajo virtual: es el que más versatilidad ofrece dentro del grupo de los que se usan tradicionalmente para la evaluación de deflexiones elásticas. Solamente se puede aplicar a los casos en los cuales se permite la superposición;
* de la doble integración: sirve para observar la ecuación de curvatura de la viga, la que se desprende de analizar la diferencial de la línea elástica de la misma a flexión pura;
* de área de momentos: se utiliza para calcular deflexiones de vigas y pórticos, además de pendientes;
* de la viga conjugada: básicamente, consiste en cambiar por un sistema de cargas aplicadas las deflexiones y pendientes que ocurren sobre una viga. Dado que no exige conocer un punto de tangente cero con antelación, permite averiguar la deflexión y la pendiente en cualquier punto.
El concepto de deflexión también se emplea en la psicología. En este caso, la deflexión funciona como un mecanismo de defensa que consiste en desviar o evitar un contacto, una emoción o una sensación. Si una determinada situación le provoca estrés a un individuo, el sujeto puede apelar a la deflexión para huir de esta situación y no estar forzado a hacerle frente.
La deflexión hace que la persona lleve a cabo una acción que no necesita o que le permite no realizar algo que, en realidad, desea hacer. Todo para bloquear aquello que no quiere experimentar.
En el terreno de la botánica, por último, se utiliza la noción de deflexión para aludir a la inclinación hacia abajo de uno o más órganos. Una flor con deflexión exhibe su pedúnculo torcido..
