La integridad del individuo entra en juego ante un dilema moral.
Un dilema moral es una disyuntiva que aparece cuando una persona debe optar entre distintas posibilidades que, de una forma u otra, pueden producir una situación censurable desde el punto de vista ético. En ocasiones, el dilema moral se produce cuando es necesario elegir el mal menor o cuando se trata de un medio cuestionable pero que persigue un objetivo altruista o bondadoso.
Cabe destacar que se denomina dilema a una situación que obliga a un individuo a escoger entre dos alternativas. La moral, por otro lado, es aquello que se adapta o ajusta a lo que se considera positivo o bueno, en oposición a lo condenable o malo.
En cuanto a la etimología de los términos, podemos señalar que dilema deriva del griego dilēmma, que es fruto de la suma de dos partes diferenciadas: el prefijo di- (que significa “dos”) y el sustantivo lēmma (traducible como “premisa” o “proposición”). Moral, por su parte, proviene del latín moralis.
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ResumenQué es un dilema moral
Los dilemas morales se conocen en lenguaje coloquial como dilemas éticos. Esto se debe a que la ética es la disciplina filosófica que se encarga de sistematizar los conceptos del mal y el bien, definiendo de modo racional cuáles son las acciones malas y cuáles las buenas. La moral, por su parte, está formada por aquellas normas que rigen la conducta de los individuos en una comunidad específica.
Puede afirmarse que la ética, en definitiva, atañe a principios generales o universales, mientras que la moral se concentra en un contexto determinado con normas específicas de una comunidad o un sujeto, siempre con relación al bien y el mal. Cuando se produce un dilema de esta clase, el individuo se siente condicionado ya que su accionar producirá, de una manera u otra, algún tipo de menoscabo o daño.
Expresado de otra manera, el dilema moral implica que ninguna de las opciones resulta totalmente correcta o válida en cuanto a los valores que acarrea. La persona, haciendo uso de su libre albedrío, debe concretar la elección de una alternativa según su conciencia y actuar con responsabilidad teniendo en cuenta las posibles consecuencias de su acto. Por supuesto, suele tratarse de una decisión difícil debido a la ambivalencia, que incluso puede estar sujeta a un juicio social cuando la conducta incumple un mandato ético.
Un dilema moral puede producirse cuando valores contradictorios entran en conflicto.
Clasificación según el tipo
Es posible reconocer entre varios tipos de dilemas morales. Esta clasificación surge según las características del problema a afrontar y las posibilidades de acción del individuo.
Un dilema moral hipotético es aquel que plantea una situación ficticia o supuesta. Por lo tanto, el individuo no es el protagonista directo, sino que analiza qué haría en lugar del personaje ubicado en esa posición. La finalidad es impulsar una reflexión sobre lo correcto y lo incorrecto a partir de un caso hipotético.
Un dilema de solución, en tanto, expone un conflicto moral sin que el protagonista haya tomado aún alguna decisión. Frente a este panorama, se debe definir cómo actuar a partir de las alternativas a disposición, tomando una decisión que resuelva el dilema ético en cuestión.
Un dilema moral de análisis, en cambio, presenta una situación conflictiva que se resolvió. Su enfoque, de este modo, no gira en torno a cómo actuar: lo que se busca es un juicio ético de la conducta asumida, evaluando si fue acertada o no.
Otra tipología distingue entre los dilemas morales completos y los dilemas morales incompletos. En el primer caso se explicitan la totalidad de las posibles consecuencias de las opciones, tanto negativas como positivas; en el segundo caso, no se anticipan los efectos, con lo cual la persona tiene que preverlos en el marco de su debate ético.
Un dilema moral implica una duda sobre si una acción es correcta o no cuando todas las alternativas implican algún tipo de daño.
Ejemplos de dilema moral
Un ejemplo de dilema moral aparece cuando, en una escuela secundaria, un joven decide prenderle fuego a un pupitre. Los directivos, al advertir la situación, informan a los alumnos que, si no aparece el responsable del hecho, todos los estudiantes serán castigados. Así se produce un dilema moral entre los amigos del culpable, que saben qué ocurrió: ¿deberían traicionar y delatar a su amigo para evitar que todos sean sancionados, o tendrían que privilegiar la confianza y la amistad y permitir un castigo masivo e injusto?
El dilema del tranvía es otro ejemplo, en este caso de tipo hipotético. Se plantea que un tranvía que avanza sin control está a punto de arrollar y matar a cinco personas que se encuentran atadas a la vía principal. Sin embargo, existe la posibilidad de apelar a una palanca para desviarlo y dirigirlo a una vía secundaria, donde también hay una persona atada. El dilema moral es el siguiente: no actuar y dejar que el tranvía mate a cinco individuos o accionar la palanca para salvar a esos cinco sujetos pero matar de forma directa a otro. En estas decisiones bajo presión que ubican al protagonista en escenarios límite, el conflicto interno resulta inevitable.
Pensemos en el caso de un médico que tiene información precisa sobre el diagnóstico de un paciente terminal: ¿debe comunicarle todo en detalle sabiendo que puede causarle una depresión profunda o matizar los datos para que mantenga su esperanza y evitarle un sufrimiento mayor, aunque eso implique un incumplimiento del principio de honestidad? Estos dilemas profesionales son estudiados por la ética médica.
