El término latino divergens llegó al castellano como divergente. Este adjetivo se emplea para calificar a aquello que diverge. El verbo divergir, por su parte, refiere a dos elementos que se van separando de manera progresiva o a lo que resulta discordante.
Por ejemplo: «El pensamiento divergente es muy valorado en nuestra empresa», «En ocasiones, para arribar a una solución, el problema debe ser analizado de manera divergente», «Se puede acceder a la reserva natural a través de dos caminos divergentes: uno permite ingresar por la puerta este y el otro, por el acceso oeste».
El concepto en las matemáticas
La idea de divergente se emplea de diversas maneras en las matemáticas. Una serie divergente, por citar un caso, es una serie en la cual la suma de sus términos muestra una tendencia al infinito.
Es importante señalar que el término serie, se define en el ámbito de las matemáticas como una suma que se aplica a los términos de una sucesión, la cual de manera informal se puede representar con una ecuación infinita que simplemente muestre la suma de muchas variables.
Serie convergente vs. serie divergente
Cuando una serie matemática es convergente, sus términos se aproximan a cero. En cambio, cuando esa situación no se produce, la serie es divergente. Esto quiere decir que la secuencia de sus sumas parciales carece de límite.
A pesar de que en un primer momento la teoría parece separar con claridad las series divergentes de las convergentes, en la práctica no es tan fácil distinguirlas. Por ejemplo, no siempre son convergentes las series cuyos términos muestran una tendencia a cero, y esto puede apreciarse en la siguiente suma: 1 + 1/2 + 1/3 + 1/4 + 1/5 + …, la cual debe entenderse como una serie armónica divergente.
Asignación de un valor
Para asignar un valor a una serie divergente, a veces podemos recurrir a un método de sumación, el cual debe tener las siguientes propiedades para que resulte útil:
* regularidad: se da si cada vez que la sucesión s converge a x es cierta la igualdad A(s) = x;
* linearidad: el método es lineal si también lo es funcionalmente cuando se aplica a sucesiones convergentes;
* estabilidad: si tenemos dos sucesiones, y una de ellas comienza en el segundo valor de la primera, la estabilidad tiene lugar si el método de sumación se puede definir para ambas y da el mismo resultado en los dos casos.
Una opinión divergente
Las opiniones divergentes son opuestas o, al menos, no coinciden entre sí. Si una persona sostiene que el gobierno debería reducir los impuestos para promover el crecimiento de la economía, mientras que otro sujeto cree, por el contrario, que las autoridades tendrían que incrementar los tributos para potenciar las inversiones estatales y así fomentar el desarrollo económico, se puede decir que ambas opiniones son divergentes.
Esta acepción podemos entenderla incluso si retomamos la idea de las líneas que tienden a separarse progresivamente, ya que las opiniones divergentes comienzan en una discrepancia que crece poco a poco, al aumentar la complejidad de la discusión. Cuando el tema a tratar está fuertemente ligado a otros y entre todos forman un arbol de conceptos, no resulta posible estar en desacuerdo con respecto a uno de los principales y de acuerdo en los que a éste se encuentran supeditados.
No usaríamos el concepto de divergencia de opiniones para describir una conversación en la cual dos personas escogen colores opuestos de ropa, sino que sirve para describir conjuntos de ideas que tienden a ser opuestas, líneas de pensamiento que se alejan por diversas cuestiones, generalmente muy delicadas.
Trilogía literaria
«Divergente» (o «Divergent», en su idioma original), por último, es el nombre de una trilogía literaria escrita por la estadounidense Veronica Roth.
La primera novela de la saga lleva el mismo título («Divergente»), y le siguen «Insurgente» y «Leal».