Divulgación es la acción y efecto de divulgar (difundir, promover o publicar algo para ponerlo al alcance del público). El término proviene del latín divulgatio.
Por ejemplo: “El científico alemán realizó una tarea incansable para la divulgación de este descubrimiento”, “Teníamos un buen producto, pero fallamos en su divulgación”, “El presidente se indignó por la divulgación de los temas tratados en su última reunión con los ministros”.
La divulgación, por lo tanto, puede estar asociada a la tarea de prensa y comunicación. Aquello que publican o emiten los medios se está divulgando, ya que dichos contenidos quedan al alcance de la sociedad. Por eso cuando una empresa quiere promocionar una novedad, suele acudir a la prensa para que ésta sea el vehículo que lleve sus noticias a la gente.
Divulgación científica
Se conoce como divulgación científica a la tarea de procesar y difundir el conocimiento científico de un modo que resulte accesible para el público general. Esta actividad suele ser llevada a cabo por científicos o periodistas especializados que tienen grandes conocimientos sobre la temática en cuestión y que ponen sus esfuerzos en traducir el lenguaje científico al habla coloquial.
La divulgación científica puede realizarse en cualquier formato, como una revista, un programa de televisión o un sitio de Internet. Algunos canales de televisión se especializan en divulgación científica, como el Discovery Channel. Entre las personalidades más famosas que se dedicaron a la divulgación científica se destacan Carl Sagan y Stephen Hawking.
Cabe mencionar que, en algunos casos, la divulgación científica pierde su valor ya que lo que se difunde es información falsa o errónea. Las fuentes poco confiables, en combinación con las ansias de fama y notoriedad han dado lugar a un gran número de documentales de naturaleza ilegítima, y la facilidad con la que es posible llegar a las masas en la actualidad da más espacio a este tipo de fraudes.
La importancia de Internet
Internet es, sin lugar a dudas, la herramienta más valiosa a la hora de realizar la divulgación de cualquier tema u obra, ya que nos ofrece diferentes formas de llegar a la gente y de obtener respuestas y opiniones. Dentro de este universo cibernético, las redes sociales son el medio más fácil de usar y directo para hacer públicas nuestras ideas; nos permiten estar conectados constantemente con un número potencialmente considerable de personas de todas partes del mundo.
Entre los beneficios más sobresalientes de las redes sociales se encuentra el hecho de que cada usuario pueda compartir información con un número de personas que no necesariamente se conozcan entre sí, y que éstas repitan el procedimiento para comenzar una cadena de divulgación de dimensiones incalculables. Ya sea que queramos hacer conocido nuestro último libro, o que aboguemos por la defensa de los animales, las redes sociales son un excelente punto de partida.
Divulgación para conseguir financiación
Por otro lado, siempre dependiendo de nuestros objetivos, Internet ofrece un sinfín de servicios para la divulgación. Un ejemplo muy resonado en los últimos años es el crowdfunding, que también recibe el nombre de micromecenazgo o financiación masiva, entre otros. Básicamente, se trata de un canal para hacer conocida una idea y conseguir el apoyo económico de quienes se interesen en ella, sin necesidad de un contacto físico, cara a cara.
Gracias a los portales de crowdfunding, es posible hacer llegar emprendimientos a gente de todo el planeta sin ningún tipo de inversión económica previa: basta con darnos de alta de forma gratuita en algunos de los varios sitios que ofrecen este servicio y publicar nuestro proyecto, acompañado de un vídeo atractivo en el cual se expliquen nuestros objetivos con claridad. Por lo general, para recibir la aprobación de la compañía es necesario recibir un cierto número de votos positivos por parte de los demás usuarios.