El vocablo latino statūtum llegó a nuestro idioma como estatuto. El concepto se usa para aludir a un ordenamiento o conjunto de reglas que, en un determinado ámbito o entidad, disponen de fuerza de ley o tienen eficacia para obligar.
Cabe destacar que una regla es una indicación que debe cumplirse. Por lo general, quien no acata una regla recibe algún tipo de sanción o castigo.
Un estatuto puede regular el funcionamiento de una sociedad.
Qué es un estatuto
Puede entenderse al estatuto como una serie de reglas que se crean y se dan a conocer para que sean consideradas por un sector específico de la comunidad. Lo habitual es que el estatuto esté subordinado a leyes que tienen un rango superior.
Existen distintos tipos de estatuto. Su función es organizar el funcionamiento de una entidad o regular las relaciones entre las personas según ciertos criterios para minimizar y/o resolver posibles conflictos.
Funcionamiento de una persona jurídica
Cuando se constituye una persona jurídica, las normas que acuerdan los fundadores componen el estatuto de la nueva sociedad o fundación. Este estatuto fija las obligaciones y los derechos de los accionistas o socios y establece las disposiciones para el funcionamiento de la sociedad en cuestión.
El estatuto tiene una doble función. Por un lado, como ya indicamos, se encarga de la regulación interna al instituir obligaciones y derechos de los miembros y delimitar los vínculos entre ellos. Por otra parte, el estatuto también ordena el funcionamiento de la sociedad respecto a terceros.
Los estatutos de una sociedad, en definitiva, hacen posible su estructuración. Así se busca favorecer la operatividad de la firma y minimizar la posibilidad de futuros conflictos que pudieran surgir entre los socios.
Los estatutos están subordinados a reglas superiores, como las leyes.
El estatuto de una pyme
Tomemos el caso de las pequeñas y medianas empresas (pymes). La creación de un estatuto a la hora de la fundación de una compañía de este tipo resulta indispensable para que luego pueda operar con normalidad y para que, en caso de un posterior enfrentamiento entre los socios, el problema pueda dirimirse de acuerdo a lo estipulado en las normas.
El estatuto de una pyme define desde el nombre de la sociedad creada hasta el objetivo de la misma, pasando por las aportaciones de capital de los socios, la distribución de las utilidades y la asignación de las funciones. El estatuto también nombra al administrador, al órgano de vigilancia y a los representantes legales de la sociedad.
Otras cuestiones resueltas por un estatuto de esta clase son los pasos a seguir si un socio muere o deja la sociedad y el modo de convocar a una junta de socios para la toma de decisiones.
La base de un club
No solo las sociedades comerciales tienen estatutos. Una asociación sin fines de lucro y una entidad que reúne a individuos con intereses comunes y que impulsa actividades deportivas o culturales también pueden regirse por estatutos.
Veamos el estatuto del Club Atlético Boca Juniors, uno de los clubes más importantes del continente americano. Esta institución argentina aprobó su primer estatuto en 1919; dicho estatuto fue modificado y actualizado en varias oportunidades.
En la actualidad, el estatuto del Club Atlético Boca Juniors consta de seis títulos. El primer artículo del Título I, por ejemplo, señala que uno de los propósitos de la asociación civil es impulsar el “desarrollo integral” de sus asociados.
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