Un animal manso no es bravo.
Manso es un adjetivo que puede aludir a aquel o aquello de características suaves. Ésta es tan sólo una de sus acepciones.
TemasEtimología y significados
El término manso tiene una interesante etimología: proviene del latín mansus, que significa «domesticado» o «dócil«. A lo largo del tiempo, esta palabra ha adquirido diferentes significados en español, entre los que se encuentran los siguientes:
- como adjetivo: se refiere a una persona o animal que es tranquilo, dócil o suave en su comportamiento. También se utiliza para describir algo que no es agresivo o peligroso. Esta acepción proviene directamente del latín mansus;
- como sustantivo: en algunos contextos, manso puede referirse a una persona de carácter sumiso, alguien que no se muestra enérgico o que evita el conflicto (ej: «Esta mañana he hablado con el manso»);
- en el ámbito religioso: en el contexto religioso cristiano, manso es uno de los valores o actitudes recomendadas por Jesucristo en el Sermón del Monte: «Bienaventurados los mansos, porque ellos heredarán la tierra»;
- en el ámbito geográfico: en algunas regiones de América Latina, especialmente en zonas rurales, se utiliza manso como nombre de ríos o arroyos de corriente tranquila.
Es importante tener en cuenta que, aunque los diferentes significados de manso pueden tener una conexión en su origen etimológico, han adquirido matices y usos particulares a lo largo del tiempo en la evolución del idioma español.
Tranquilo, pacífico o dócil
Un individuo manso es alguien tranquilo, pacífico o dócil. Por ejemplo: “Ricardo es manso, no es fácil hacerlo enojar”, “Me considero un hombre manso ya que no me gusta discutir ni pelear”, “Pensé que el chico era manso, aunque esta mañana se trenzó a golpes con unos compañeros que lo molestaron”.
Animal manso
Un animal manso, en tanto, no es bravo. Estos individuos presentan un carácter apacible y no tienden a ser agresivos: “Es un caballo manso, no tendrás problemas para andar con él”, “Quiero adoptar un perro que sea manso para no poner en riesgo a mis hijos”, “Mi tío creció en un circo y siempre me contaba que, cuando era niño, solía jugar con un tigre manso”.
Nótese que el adjetivo manso se usa para describir a los animales con mayor frecuencia que a las personas. Esto se puede deber a diferentes razones, como ser que la violencia física se encuentra reprimida en nuestra sociedad pero es parte esencial de la supervivencia de las demás especies. Dicho de otra manera, no suele ser necesario aclarar que «una persona no es violenta», mientras que de cierto animales se espera lo contrario.
Cosa sosegada o aplacada
Cuando el concepto se aplica a algo insensible o inmaterial, se hace alusión a una cosa sosegada o aplacada: “No tendrás problemas al navegar porque este es un río manso”, “El mar manso supuso un inconveniente para los jóvenes que deseaban surfear”, “La noche está preciosa gracias a ese aire manso que alivia el calor”.
Como se puede apreciar en los primeros dos ejemplos, solemos recurrir a este adjetivo para hablar del agua que no supone una amenaza para el ser humano. Dado que no estamos preparados para mantenernos a flote de forma indefinida o para respirar bajo el agua, es esencial para nosotros conocer las características de un mar o un río antes de decidirnos a nadar en ellos.
Los mares mansos no tienen grandes olas.
Masía
Manso también puede hacer referencia a una masía o a los bienes y tierras que, liberados de cualquier carga, eran propiedad de ciertos monasterios y parroquias.
Masía es un término que se utiliza principalmente en España, especialmente en las regiones de Cataluña y Valencia. Se refiere a una casa de campo o granja típica de allí, por lo general, de grandes dimensiones y construida con materiales como piedra o adobe. Las masías suelen estar ubicadas en zonas rurales y tener terrenos agrícolas o ganaderos asociados.
