Metamorfosis es un término que proviene del latín metamorphosis, a su vez derivado de un vocablo griego que significa transformación. El sentido más preciso de la palabra, por lo tanto, hace referencia a la mutación, la evolución o el cambio de una cosa que se convierte en otra diferente.
La metamorfosis puede ser física (concreta, real) o simbólica (abstracta). El cambio de un estado a otro, como de la pobreza a la riqueza o de la soltería al casamiento, también puede ser denominado como una metamorfosis. Por ejemplo: «Susana ganó la lotería y experimentó una metamorfosis: ahora vive en una mansión sobre la playa y tiene un coche de lujo».
Tipos de metamorfosis
Para la zoología, la metamorfosis es la modificación que viven ciertos animales en el marco de su crecimiento y el desarrollo de su ciclo de vida. En este proceso de transición, el animal puede cambiar de forma e incluso de género.
Es posible distinguir entre la metamorfosis simple, sencilla o incompleta (donde el animal atraviesa diferentes mudas hasta transformarse en adulto, sin periodos de inactividad, como es el caso de los saltamontes) y la metamorfosis complicada o completa (la larva es muy distinta al adulto y pasa por estadios donde no se mueve y hasta puede dejar de comer, como sucede a las mariposas).
En la geología, en tanto, el metamorfismo es el cambio (sin que se produzca una modificación de estado) en la formación mineral o química de una roca, que sucede cuando ésta se halla bajo la influencia de una presión o temperatura diferente de las que le dieron origen.
La obra cumbre de Kafka
«La metamorfosis» es un cuento del checo Franz Kafka, publicado en 1915, con el título original de «Die Verwandlung».
La obra comienza cuando Gregorio Samsa, un hombre que trabaja de viajante, se despierta y descubre que su cuerpo ha cambiado, que ya no tiene forma humana sino que lleva una carcasa y los miembros de un enorme insecto, como si fuera una cucaracha gigante.
A partir de ese hecho comienza una vida en la que Gregorio se recluye en su dormitorio y deja de comunicarse normalmente con el exterior. Al principio su hermana se ocupa de él, le lleva comida, limpia y ordena su habitación y se preocupa de que no le falte nada; sin embargo, con el correr del tiempo todos se olvidan de él y la asistenta es la que se tiene que encargar de darle de comer. Olvidado por los suyos, Samsa se siente cada día más triste y solo. Escucha sus conversaciones y es capaz de comprenderlas, pero cuando abre la boca para comunicarse, de su boca salen unos sonidos monstruosos. Finalmente muere en su dormitorio, completamente solo.
Análisis de «La metamorfosis»
«La metamorfosis» es una de las obras fundamentales de Kafka, una novela de la que existen opiniones absolutamente opuestas: algunos afirman que es una de las mejores historias que se hayan escrito jamás, mientras que otros expresan que es una historia descabellada. Sin embargo, más allá de los gustos de los lectores, es importante señalar las cuestiones que destacan de esta novela, su sentido y las razones de Kafka para escribirla.
Esta obra puede hacer referencia a la soledad, la frustración y la culpabilidad que se convierten en protagonistas en la vida de una persona cuando obran sobre él ciertas fuerzas que no es capaz de controlar. El personaje sufre un cambio que no puede explicar y los demás, en vez de intentar acercarse a él y aprender a comunicarse desde otro plano, permanecen en su sitio, siendo exactamente las mismas personas; esto lleva a un círculo de frustración y soledad que el protagonista no es capaz de afrontar y cuya única solución es la muerte, la ruptura de esas relaciones, el viaje a una dimensión diferente donde sólo existan seres capaces de comprenderlo.
Lo sobrenatural y lo absurdo vs. lo realista
Todas las novelas de Kafka se caracterizan por presentar diferentes mecanismos sobrenaturales o absurdos con una mirada realista y verdadera, consiguiendo una explicación lógica para esas cuestiones que parecen inentendibles; sus personajes no terminan de comprender si lo que sucede es producto de un sueño o parte de la realidad y, sin embargo, siguen adelante. Gregorio Samsa no cree que sea una cucaracha, sino que todo se trata de un mal sueño que terminará cuando despierte y pueda ir a trabajar.
Por otro lado, cuando descubre que no hay nada que pueda hacer para revertir eso, intenta aceptarlo. A pesar de sus esfuerzos, la incomprensión y la frialdad con que lo tratan los suyos lo obligan a refugiarse en la soledad. Es una obra donde pueden analizarse temas fundamentales de la vida, como la tolerancia y el sentido de la existencia más allá de las apariencias.
Ejemplos de metamorfosis
Más allá de la metamorfosis biológica, la metamorfosis geológica y la metamorfosis literaria ya mencionadas, podemos nombrar otros ejemplos de conversión, adaptación o renovación.
Una metamorfosis económica se produce cuando hay un cambio en la dinámica de la economía. Supongamos que se descubre petróleo en una región: dicho hallazgo deriva en una inversión millonaria en la zona, la creación de puestos de empleo y otras novedades. Este cambio estructural también genera una metamorfosis social ya que la nueva realidad modifica las condiciones de vida, las ocupaciones y hasta los vínculos entre las personas.
Tomemos ahora el caso de un país donde, a lo largo de tres décadas, se sucedieron gobiernos de izquierda y centro-izquierda. Sin embargo, diversos factores causan una alteración en las preferencias hasta entonces habituales de los electores, que comienzan a votar opciones de centro-derecha y derecha. Los analistas, en este marco, subrayan la metamorfosis política de la nación.
Si en una ciudad se impulsa la construcción de rascacielos modernos en un área hasta entonces despoblada, se desarrolla una metamorfosis urbana. Por otro lado, un ingeniero que abandona su profesión para radicarse en el campo y dedicarse al cultivo de hongos comestibles lleva adelante un proceso de metamorfosis personal.