Pandereta es el diminutivo de pandera, un instrumento musical también conocido como pandero. Las panderas presentan aros superpuestos y cubiertos con piel, que disponen de cascabeles o sonajas. Al golpear sobre la piel con una mano o con los dedos, se produce el sonido.
Las panderetas, por lo tanto, son panderos pequeños. Forman parte del conjunto de los tambores de marco, cuyo parche tiene un diámetro superior respecto a su profundidad.
Es importante aclarar, de todos modos, que el uso de pandereta o pandero es indistinto en algunos lugares. Incluso hay regiones donde a la pandereta se la llama pandero y viceversa, o definiciones que mencionan que el pandero carece de sonajas, por lo cual la distinción entre ambos puede resultar confusa.
Los orígenes de la pandereta son remotos. Este instrumento solía emplearse en rituales religiosos aunque, con el paso del tiempo, comenzó a utilizarse en otros contextos.
Compositores clásicos como el inglés Gustav Holst, el ruso Piotr Ilich Chaikovski y el austríaco Wolfgang Amadeus Mozart han incluido la pandereta en sus obras. Este instrumento de percusión también se emplea en canciones modernas.
Por lo general las sonajas de la pandereta son de acero templado, hierro o latón. El sonido que se obtiene al tocar la pandereta en posición horizontal es diferente al que se logra en posición vertical: de acuerdo a los expertos, lo ideal es que el instrumento esté posicionado con una inclinación de entre 40 y 45 grados para equilibrar las vibraciones de los cascabeles.
Dado que la pandereta sirve para acompañar música de diversos géneros, se trata de un instrumento que muchas personas aprenden a ejecutar, aunque por lo general lo hacen de forma complementaria a otro más complejo. A pesar de su simpleza, no debemos caer en el error de pensar que no acarrea una curva de aprendizaje o que carece de versatilidad; por el contrario, son varios los puntos a tener en cuenta para tocar la pandereta como un profesional.
El primer paso es la sujeción de la pandereta, la cual debemos realizar con la mano que menos dominemos (las personas diestras, con la mano izquierda y las zurdas, con la derecha). Para conseguir una ejecución precisa, que se sincronice correctamente con el ritmo de la música, y producir sonidos consistentes se recomienda usar la mano hábil para dar los golpes.
Para sostener correctamente la pandereta debemos ubicar el dedo pulgar de un lado y los cuatro restantes del otro, en la parte del marco que se destina al agarre. En algunos modelos, se trata de un segmento que carece de sonajas. Estas últimas, por otro lado, no debemos tocarlas al sostener el instrumento, ya que si lo hacemos podremos opacar el sonido.
La sujeción es, por lo tanto, más complicada de lo que parece, ya que tampoco debemos imprimir demasiada fuerza o rigidez, sino encontrar un punto medio para que la pandereta vibre más. Con respecto a los golpes, se recomienda comenzar a practicar con la mano, intentado reproducir ritmos cada vez más complejos, y luego aprender a usar una baqueta para conseguir una mayor intensidad de sonido.
Lejos de dar pequeños golpecitos idénticos a lo largo de cada canción, una buena técnica de pandereta nos permite intercalar y combinar diferentes tipos de ejecución, usando la baqueta, uno o más dedos, con varios grados de intensidad para conseguir muchos sonidos que se ajusten al resto de la música.
Cabe resaltar que, de acuerdo a la Real Academia Española (RAE), la locución adjetiva “de pandereta” se utiliza para calificar a aquello que resulta poco serio. Por ejemplo: “Estoy harto de esta empresa de pandereta”, “Con este gobierno de pandereta nunca se solucionarán los problemas económicos”.