
El participio es, al igual que el gerundio y el infinitivo, una forma no personal en la que puede hallarse un verbo.
Participio es un concepto propio del ámbito de la gramática. Según se advierte al consultar el diccionario de la Real Academia Española (RAE), esta palabra que deriva del vocablo latino participium posee tres acepciones, aunque una de ellas, referida a un trato o a una comunicación, ya está en desuso.
En español, indica la teoría, se interpreta como participio a la forma no personal de los elementos de una oración conocidos como verbos. Se caracterizan por terminar en ‘-do’ y por servir, en compañía de un término auxiliar, para la conformación de un tiempo compuesto. Un participio, además, puede llegar a asumir la función de un adjetivo, admitiendo en ese caso determinaciones de número y género.
Desde una mirada semántica, hay que decir que un participio permite describir una situación finalizada. Y desde una perspectiva morfológica se reconocen dos modalidades: una de participio regular y la otra, de participio irregular. A veces un mismo verbo admite ambas formas, pero no siempre aplicadas con igual finalidad o estilo, ya que el participio regular por lo general se destina a una forma verbal compuesta y el irregular suele aprovecharse como modificador nominal.


Tipos de participio
Los participios se encuadran en diferentes categorías o conjuntos de acuerdo a las particularidades que presenten.
En principio se distingue, a grandes rasgos, entre participios regulares (en los cuales se reconoce al afijo flexido ‘-do’) y participios irregulares (fáciles de identificar por su terminación en ‘-to’ o en ‘-cho’).
También existen el participio presente (o del presente, que procede del presente latino, termina en ‘-nte’ y en idioma español ha pasado a estar integrado casi completamente en familias de sustantivos o adjetivos) y el pasado participio (aquella forma no personal que se asemeja al adjetivo). Otras maneras de mencionarlos son, respectivamente, participio activo y participio pasivo.
El participio prenominal y el participio absoluto figuran, de igual modo, en el listado de posibilidades a tener en cuenta.

Un participio denota que algo (una acción o situación) ha concluido.
Características y funciones
Al buscar información acerca de las características y funciones de los participios se advierte que reúnen particularidades vinculadas a la categoría verbal a la cual corresponden. Asimismo, suma saber que se conforman con complementos típicos de los verbos.
Un participio pasivo está asociado a los verbos transitivos, admitiéndose en perífrasis verbales y en la voz pasiva.
Esta clase de palabras, incluso, pueden conservar, ya sea en la presentación expresa o tácita, al agente correspondiente al sujeto de la modalidad activa.
Los participios vinculados a verbos intransitivos, en tanto, admiten empleos en varias clases de complemento predicativo y en cláusulas absolutas, así como son apropiados para actuar como atributos del verbo estar o como modificador nominal. Al comparar ambas alternativas queda al descubierto que mientras un participio de verbo transitivo lleva implícito al agente, el participio de un verbo intransitivo refleja el resultado de la cuestión a la cual alude el verbo.
Es oportuno remarcar, además, que el participio no llega a brindar datos de índole temporal, pero sí es útil de forma indirecta en pos de una localización temporal del contenido de una oración. Los elementos concesivos, causales y condicionales son claves para la interpretación de una estructura que abarque a un participio. Éste sí, en cambio, suma información de carácter aspectual, dando cuenta de algo que ha culminado antes en relación al momento señalado mediante el verbo principal.
Vale la pena tener presente que, en la lengua española, hay verbos a los cuales se les reconocen oficialmente un par de participios, siendo uno regular y el restante, irregular. Ocurre esto con, por dar precisiones al respecto, con freír (cuyos participios son frito y freído), con proveer (que encuentra en provisto y proveído a los participios) y con imprimir (en este caso, los participios aprobados para su utilización son impreso e imprimido).

De acuerdo al diccionario de la lengua española, se reconocen en nuestro idioma el participio pasivo y el participio activo, aunque también hay otras categorías asociadas a los participios.
Ejemplos de participio
Constantemente, al hablar o escribir independientemente del idioma que se domine, utilizamos diferentes clases de palabras. Sin dudas, los participios forman parte de numerosas frases o expresiones pero no siempre la gente dispone de bases teóricas para saber reconocerlos y diferenciarlos de otros tipos de términos.
Por ese motivo, y dado que son frecuentes los errores al enseñar, aprender y usar participios, antes de concluir este artículo compartiremos a modo de ejemplo distintas oraciones que se nutren con algún participio.
Sucede así, por indicar un caso específico, en el siguiente enunciado: “Víctor, testigo involuntario del macabro asesinato, está decidido a denunciar al autor material del crimen” (participio: decidido).
“Era cantado: los egresados revolucionaron el acto de cierre del ciclo lectivo al corear el hit del momento frente a todos los directivos de la institución” (cantado).
“Seguramente los castigarán por haber ido al baile sin autorización de los padres” (ido).
“La situación fue aclarada, se trató de una confusión nomás” (aclarada).
“Posee una sabiduría surgida de la experiencia vivida” (vivida).
“Puso en práctica el concepto aprendido” (aprendido).