Peso es una palabra que proviene del término latino pensum y tiene distintos usos. Puede referirse, por ejemplo, a la fuerza con que la Tierra atrae a un cuerpo y a la magnitud de dicha fuerza.
En un sentido similar, un peso es un objeto pesado que permite equilibrar una carga o una balanza. También se utiliza el peso para clasificar a los deportistas de ciertas actividades (como el peso mosca en el boxeo).
El peso de las personas
En la sociedad en la que vivimos en la actualidad, donde existe el culto al cuerpo y se busca siempre la belleza, se habla continuamente de la necesidad de que cada persona tenga un peso adecuado que no exceda los límites de lo considerado «estéticamente bello». Por eso, el peso preocupa mucho a un importante número de personas.
No obstante, hay que subrayar que no sólo por cuestiones estéticas se debe tener un peso óptimo sino también por motivos de salud, ya que contar con un exceso de kilos supone enfrentarse a todo tipo de enfermedades y dolencias como puede ser, por ejemplo, problemas circulatorios o de tipo cardiovascular.
Índice de la masa corporal
En concreto, para conocer si alguien está dentro de su peso normal se lleva a cabo el cálculo del IMC (Índice de masa corporal). Esta medida tiene en cuenta tanto lo que es el propio peso como la altura de la persona en cuestión y se consigue llevando a cabo la división del número de kilos por el cuadrado de la estatura, en metros.
De esta manera, el resultado del mismo se analizará en base a estos criterios: si el resultado se sitúa entre 18,5 y 24,9, el individuo se encuentra en peso saludable; si está entre 25 y los 29,9 tiene sobrepeso; en el caso de que la medida obtenida esté entre 30 y 39,9 se establece que la persona tiene obesidad; y finalmente si sobrepasa aquella última cifra padecerá una situación de obesidad mórbida. Este último tipo de obesidad origina que el sujeto no sólo sufra exclusión social en muchos casos, sino también incluso minusvalía.
La importancia del peso saludable
El peso saludable tiene una gran importancia. Lo ideal es que un nutricionista o dietista sugiera la dieta propicia para conservar el peso corporal adecuado.
De todos modos, todas las personas pueden prestar atención a la nutrición y elegir comida saludable para cuidar el organismo. La clave en cuanto a la alimentación es controlar las proteínas, los carbohidratos, las grasas, etc., que se consumen.
Cuando la pérdida de peso resulta necesaria, es conveniente realizar ejercicio de manera periódica o acudir a un gimnasio y utilizar la cinta de correr, por ejemplo. Si la necesidad es lograr una ganancia de peso, en tanto, se deben ingerir alimentos con una elevada cantidad de calorías.
No se puede dejar de mencionar que existen trastornos alimenticios como la anorexia y la bulimia que imposibilitan mantener el peso ideal. En esos casos, un experto en psicología o psiquiatría debe indicar los pasos a seguir.
Es indispensable tener en cuenta que la alimentación y el peso corporal tienen una incidencia directa en la salud y el bienestar. Aquel que ingiere comida chatarra diariamente es muy probable que tenga sobrepeso y que eso repercuta en distintos niveles, como un mayor riesgo de padecer problemas cardíacos o trastornos circulatorios. En cambio, quien conserva una dieta equilibrada seguramente registre menos problemas de salud y se sienta, en general, mejor.
Diferencias con la masa
Es importante distinguir entre peso y masa, que es la cantidad de materia de un cuerpo. Esto quiere decir que la masa no depende de la fuerza de gravedad ni de la posición del cuerpo en el espacio.
El kilogramo es la unidad de masa en el sistema internacional de unidades. El peso, en cambio, se mide en newton.
Otros usos de la noción de peso
El concepto de peso puede adquirir un significado moral o abstracto. Se le dice peso a la entidad e importancia de algo, a la fuerza de las cosas no materiales, a la responsabilidad que alguien tiene a su cuidado y al dolor o la preocupación por algo: «Tus palabras no tienen peso para mí», «Tengo el peso de salvar a la familia», «María aún no pudo sacarse el peso de la muerte de su novio».
Por otra parte, el peso es la unidad monetaria de varios países americanos. Aunque reciben el mismo nombre, cada divisa tiene su propio valor. El peso argentino no tiene el mismo valor que el peso uruguayo, y éste no vale lo mismo que el peso mexicano o chileno.
Estas monedas pueden enfrentarse a distintos problemas. Si nos centramos en el peso argentino, la devaluación casi constante asociada al tipo de cambio con el dólar estadounidense que registró en los últimos años contribuye a la inflación, con lo cual el poder adquisitivo de la población de Argentina es cada vez menor: el peso se deprecia y alcanza para comprar menos productos en comparación a semanas o meses previos.