Una reunión de profesionistas en una oficina
La noción de profesionista se emplea en México para aludir a un profesional: un individuo que se dedica al ejercicio de su profesión con eficiencia y capacidad. Un profesionista, por lo tanto, es alguien que dispone de los conocimientos académicos o técnicos necesarios para desarrollar una determinada labor.
TemasAlgunos ejemplos
Por ejemplo: “De acuerdo a un estudio, los profesionistas perciben un ingreso que es un 40% superior respecto a lo que ganan quienes no tienen estudios”, “Para mí es un orgullo ser el primer profesionista de la familia, un logro que conseguí gracias al apoyo de mis padres”, “Los nuevos profesionistas tienen dificultades para insertarse en el mercado laboral”.
Veamos las tres oraciones en detalle para explorar el significado de la palabra profesionista y sus diferentes matices. En la primera de ellas vemos que se usa como sinónimo de «profesional» sin hacer referencia al nivel de su trabajo, a su desempeño académico o a su experiencia. Simplemente se centra en el hecho de que sean personas que hayan obtenido un título terciario o universitario para marcar la diferencia del ingreso que perciben frente al del resto de las personas en una situación laboral similar.
Pasamos a la segunda oración, donde el emisor es el propio profesionista y menciona que se siente orgulloso de ser el primero de su familia en haber alcanzado tal nivel de estudios, algo que adjudica a la ayuda de sus padres. Esto es muy común en familias de clase media o baja, en las cuales los mayores hacen todo lo posible por sostener económicamente a los jóvenes para que se forjen un futuro mejor, algo que por lo general se puede conseguir por medio de los estudios formales.
Por último, tenemos un ejemplo en el cual se habla de la dificultad que supone para las personas recién recibidas conseguir un trabajo en el cual poner en práctica lo que han estudiado durante años, en muchos casos con gran esfuerzo. Ser un «nuevo profesionista» no es fácil en un mercado saturado de trabajadores con cualificaciones similares, y la competencia se vuelve cada vez más feroz.
Relación con «profesional»
Profesionista y profesional son sinónimos cuando la intención es nombrar a la persona que trabaja con excelencia gracias a sus estudios y/o su experiencia. Mientras que ambos términos resultan invariables en cuanto al género, sí cambian respecto al número.
Esto quiere decir que expresiones como “El profesionista lo está esperando en la sala de reuniones” y “La profesionista lo está esperando en la sala de reuniones” son correctas. En plural, lo adecuado sería indicar: “Los profesionistas lo están esperando en la sala de reuniones” (si el grupo está compuesto enteramente por hombres o hay al menos uno hombre entre varias mujeres), “Las profesionistas lo están esperando en la sala de reuniones” (para hacer referencia a un grupo compuesto únicamente por mujeres).
El ordenador es una herramienta común a profesionistas de diferentes ámbitos.
Por lo general la idea de profesionista se vincula a contar con un título universitario. De todos modos, es posible nombrar a alguien como profesionista aun cuando no haya cursado o completado estudios superiores. Lo central es que el sujeto esté en condiciones de trabajar con destreza y pericia, marcando una diferencia frente al resto de la gente.
Dependiendo del ámbito, en algunos casos bastante raros es posible acceder a un puesto laboral de alto rango sin contar con estudios formales, con un título que nos habilite como profesionistas. Sin embargo, se trata de una posibilidad muy reducida que se da en individuos dotados de un gran talento natural formados de manera autodidacta o en aquellos que cuentan con los contactos necesarios para pasar por encima de los requisitos.
