Con origen en el vocablo latino caseus, queso es un término que alude a un producto elaborado con la cuajada de la leche. La crema, en tanto, es una sustancia grasa que se encuentra en el mencionado líquido blanquecino que sale de las mamas de los mamíferos para alimentar a las crías.
El queso crema, en este marco, se prepara a partir de la combinación de leche y crema. Apelando a fermentos lácticos, se hace cuajar la mezcla para obtener un queso untable que suele consumirse sobre galletas o pan.
Es importante recordar que los quesos se producen con la maduración de la cuajada. Para cuajar la leche, en tanto, pueden usarse bacterias o ácidos. En el caso del queso crema, adquiere su consistencia característica a partir de la utilización de una cantidad elevada de crema (nata), lo que implica incluir un nivel alto de grasa.
La presencia de queso crema es habitual en el desayuno. Muchas personas lo untan en tostadas, e incluso lo combinan con mermeladas o jaleas. El queso crema también se destina a la preparación de diversas recetas, tanto saladas como dulces.
Hay salsas que llevan queso crema y se emplean para el acompañamiento de pastas o de arroz. Con queso crema, asimismo, se desarrollan diversas clases de tortas y postres.
Cabe destacar, por otra parte, que el queso crema se comercializa en diversas presentaciones. A la tradicional se le agregan versiones saborizadas (con jamón, salame o salami, cebolla y otros ingredientes) y de bajas calorías.
Como sucede con casi todas las recetas que incluyen algún producto de origen animal, el veganismo tiene su propia versión del queso crema, el cual resulta muy fácil de preparar en casa, además de ser muy sano y económico. El queso es uno de los alimentos que más hacen dudar a quienes se plantean «dejar la carne», ya que en sus muchas variedades atrae a casi todos los paladares. Sin embargo, las buenas recetas veganas pueden llegar a ser incluso más deliciosas que las originales.
El queso crema vegano requiere simplemente dos ingredientes muy accesibles, aunque puede complementarse con otros para potenciar su sabor y ajustar su densidad a la preferencia de los comensales. Los fundamentales son yogur (obviamente, vegano) y sal, los complementarios, especias o hierbas. Con respecto a los materiales, a lo largo del proceso es necesario un trozo de tela, como ser gasa o una servilleta, una goma y un recipiente cilíndrico, que puede ser una jarra.
Antes de comenzar con la receta, es importante resaltar que el queso crema vegano es más sano que el tradicional, no incluye violencia contra ninguna especie y, por consiguiente, es más considerado con el medio ambiente. Si el yogur lo preparamos en casa, también ahorramos plástico y colaboramos con la lucha contra la contaminación.
Los pasos para la preparación del queso crema vegano son los siguientes:
* colocar el trozo de tela que hayamos escogido en el recipiente cilíndrico y mantenerlo sujeto a él usando la goma;
* echar el yogur y dejarlo reposar en el refrigerador por un período no menor de 8 horas, con el objetivo de que se deshidrate. Este punto es fundamental para su densidad, la cual aumenta cuanto más tiempo lo dejemos en el frío;
* cuando haya alcanzado la consistencia deseada, lo colocamos en un bol, añadimos un poco de sal y removemos hasta que se integren los dos ingredientes de forma correcta.
El tipo de yogur que utilicemos repercutirá en el tiempo que debamos dejarlo en el refrigerador, ya que la cantidad de agua en cada uno es diferente. Entre los ingredientes que podemos agregarle al final para saborizarlo destacan el ajo o la cebolla en polvo y el eneldo.
