Un regate es un movimiento que se realiza con rapidez para evitar el asedio de un oponente. El uso más habitual del concepto se emplea en el ámbito del deporte: regate es aquello que hace un jugador para impedir que un rival le robe la pelota (el balón) o para lograr superar a un defensor sin perder el control del balón.
Por ejemplo: “Tras un regate que desairó al defensor, el capitán brasileño remató y anotó el primer gol del encuentro”, “El delantero se presentó ante la prensa como un jugador con buen regate y gran velocidad”, “El conjunto local ganó gracias al regate de López, que enloqueció a la defensa con su habilidad”.
El término puede referirse al movimiento en sí mismo o a la habilidad de realizar esta clase de movimientos. En algunas naciones, el regate es conocido como gambeta.
La base de un regate es la improvisación. El jugador que regatea observa a su defensor y la situación en general y elige, en el momento, cuál es el movimiento más adecuado para superar a su oponente. El regate suele incluir distintos tipos de amagues y estrategias para confundir al defensor.
Es importante saber que hay muchos y variados tipos de regate. No obstante, entre los más significativos se encuentran estos:
-El autopase, es el más utilizado y se ha convertido en un recurso magistral para deportistas como Neymar, Luis Suárez o Cristiano Ronaldo.
-El clásico, que se basa en un movimiento rápido del pie con el que controlar el balón y luego en la salida por uno de los lados dejando “plantado” al contrincante. Entre los futbolistas que mejor lo han ejecutado a lo largo de la historia del fútbol están Maradona, Cruyff, Ronaldinho, Messi o Pelé.
-La vaselina, que destaca por su espectacularidad ya que la pelota pasa por encima del contrincante, que acaba absolutamente despistado. Maestros en realizar este regate han sido y son Garrincha, Pelé, Raúl o Riquelme.
No obstante, también son regates conocidos el túnel, la bicicleta, la cola de vaca o el de la cuerda.
Modificar el ritmo de forma imprevista, establecer un freno en plena carrera, cambiar la dirección, realizar un auto-pase o intentar hacer pasar el balón por entre las piernas del otro jugador son algunas de las modalidades del regate.
Los jugadores más habilidosos, como Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, son expertos en regate y pueden eludir a una gran cantidad de jugadores rivales gracias a este talento.
Concretamente el primero, jugador de la selección argentina y figura indiscutible del F.C. Barcelona, ha conseguido copar en muchas ocasiones las portadas de los medios de comunicación deportivos de todo el mundo gracias a los espectaculares regates que ha realizado. En los últimos años quizás uno de los más sorprendentes fue el que llevó a cabo en un partido de Copa ante el Athletic de Bilbao, en mayo de 2015. Regate que acabó en el gol y que para muchos expertos es el mejor de toda su carrera y un momento que ha pasado a la historia del fútbol, pues consiguió regatear a tres rivales sin apenas esfuerzo.