Retroceso es un término de nuestra lengua que procede del vocablo latino retrocessus, el cual es fruto de la suma de dos componentes claramente delimitados como son el prefijo retro– (que puede traducirse como «hacia atrás») y la palabra cessus (que es sinónimo de «caminado»).
Se denomina retroceso al proceso y el resultado de retroceder (replegarse, recular, volver por el mismo camino que se recorrió). Por ejemplo: «El alud bloqueó el camino y forzó nuestro retroceso: eso nos impidió llegar a la cumbre», «La presión del rival obligó el retroceso del equipo local, que tuvo que defenderse cerca de su propia área», «Este fallo supone un retroceso pero seguiremos luchando hasta que se haga justicia».
Usos del término retroceso
El retroceso puede ser físico o simbólico. Supongamos que una pareja realiza una excursión en una montaña, avanzando por un sendero hasta que el mismo se interrumpe por un precipicio. La aparición del abismo exigió el retroceso de estas personas: si seguían caminando, se caían. Por eso tuvieron que regresar y volver sobre sus pasos.
Cuando el retroceso es simbólico, suele marcar la pérdida de un beneficio o el alejamiento de una meta. Si una persona que está ahorrando para comprarse un automóvil debe realizar un gasto inesperado en su hogar porque se rompió un caño de su cocina, dicho gasto supondrá un retroceso en el camino hacia su objetivo.
Reducción de la superficie de los glaciares
De la misma manera, no podemos pasar por alto que el retroceso de los glaciares refiere a la reducción notable de su superficie a partir del calentamiento global. Este fenómeno, a medio o largo plazo, se puede convertir en un serio problema para la humanidad ya que se puede provocar desde inundaciones hasta sequías.
Los glaciares funcionan como depósitos naturales de agua durante el invierno que se derriten parcialmente en verano y que, por tanto, permiten liberarla y hacer que el ser humano pueda aprovechar este elemento vital. De ahí que. si llegan a desaparecer, nos encontraríamos ante un complicado problema de escasez de agua.
En las zonas donde hay glaciares, si se vieran afectadas por el retroceso de los mismos, se produciría un cambio en el flujo de la corriente, un aumento considerable de las temperaturas y modificaciones en el volumen total del agua.
Los científicos se encuentran muy preocupados por este fenómeno y han comenzado a exponer que ya hay zonas que se están viendo afectadas por ese retroceso de los glaciares. Este sería el caso, por ejemplo, de distintos rincones de América del Sur.
Otras acepciones de retroceso
Para la medicina, el retroceso implica un recrudecimiento de un trastorno o de una enfermedad que, en un principio, se estaba curando: «Los médicos informaron que hubo un retroceso en la recuperación del cantante debido a un nuevo foco infeccioso».
Retroceso, por último, es el movimiento provocado por un arma de fuego luego de que se efectúa un disparo. Dicho movimiento se desarrolla hacia atrás, es decir, en dirección contraria a la de salida de la bala.