El descubrimiento de la agricultura fue crucial en la sedentarización de nuestros antepasados.
Se llama sedentarización al acto y la consecuencia de sedentarizar. Este verbo (sedentarizar), por su parte, refiere a hacer que alguien se vuelva sedentario.
Antes de avanzar con la idea de sedentarización, es importante indicar que un pueblo sedentario es aquel que se encuentra asentado en un sitio en particular, a diferencia de un grupo nómada. Una persona sedentaria, en tanto, realiza poca actividad física.
TemasAdoptar el sedentarismo
De acuerdo a la antropología, la sedentarización es el proceso que desarrolla una comunidad al abandonar la vida nómada y adoptar el sedentarismo. Puede asociarse la sedentarización al establecimiento de las primeras ciudades, que nacieron hace unos diez mil años.
Se entiende la sedentarización como un proceso histórico que se inició con aquellas urbes pioneras y se extiende hasta la actualidad. Hoy en día, la gran mayoría de los pueblos son sedentarios: se asientan en un lugar. Esto no significa que no existan diferencias en la organización de cada uno, sino que a pesar de éstas casi todos han llegado a organizarse con esta condición.
Pese a los efectos duraderos de la sedentarización, es importante tener en cuenta que el ser humano vivió más tiempo en el nomadismo, desde fases prehistóricas hasta la consolidación de la agricultura. Las prácticas agrícolas, de hecho, fueron claves en la sedentarización y en la organización de las ciudades.
La posibilidad de explotar la tierra cambió por completo la concepción que nuestra especie tenía acerca sus propias necesidades y los métodos para satisfacerlas. El planeta se convirtió en una fuente de recursos mucho más flexible, menos severa, ya que no nos forzaba a movernos constantemente en busca de alimento. Sin embargo, no hemos sabido usar este poder con responsabilidad, y por eso llegamos a poner la estabilidad del planeta entero en riesgo.
Estilo de vida actual
Más allá de estas cuestiones propias de la antropología y de la historia, actualmente suele hablarse de sedentarización para aludir a la transición hacia un estilo de vida caracterizado por la falta de ejercicio físico. Hay sociedades que atraviesan una etapa de sedentarización vinculada a la adopción de nuevas tecnologías: cada vez más personas satisfacen sus necesidades sin salir de su hogar. Esta sedentarización provoca diversos problemas de salud, como el aumento de la obesidad.
El debate en torno a las consecuencias negativas de las tecnologías es tan inevitable como el avance de éstas. Ocurrió con la televisión, luego con los videojuegos y, en la actualidad, con Internet. ¿Nos vuelve menos inteligentes la televisión? ¿O más violentos jugar? ¿Es Internet responsable de nuestra sedentarización? Las respuestas a éstas y otras preguntas similares son relativas, pero siempre debemos recordar que ninguna de estas actividades o tecnologías son obligatorias, sino que se presentan como opciones complementarias para nuestro día a día.
La sedentarización se puede evitar o reducir con una rutina de ejercicio.
Sin lugar a duda, Internet nos brinda una serie de comodidades que nos permiten realizar actividades como acceder a una biblioteca, mirar una película, asistir a una clase o incluso trabajar sin movernos de nuestro hogar, algo que hace unos años habría sido material de una película futurista. Todo esto contribuye a reducir considerablemente nuestra actividad física, y nos tienta a permanecer sentados durante muchas más horas que en el pasado. Sin embargo, debemos resaltar que siempre podemos organizarnos para combinar estas nuevas tendencias con el ejercicio físico.
Dicho de otra manera, la sedentarización existe si usamos la tecnología como un reemplazo absoluto al estilo de vida que nos obligaba a salir de casa para hacer la compra, estudiar y trabajar. Pero si decidimos hacer pausas cada cierta cantidad de tiempo para caminar, salir al aire libre o simplemente estirar el cuerpo, podemos reducir el impacto negativo considerablemente.
