Significación, del latín significatio, es la acción y efecto de significar. Este verbo refiere a manifestar o hacer saber algo. Dicho de una palabra o expresión, está vinculado a ser el signo de un pensamiento o de algo material mientras que, aplicado a una cosa, refiere a ser, por naturaleza o convención, una representación de otra cosa distinta.
La significación también es el sentido de una palabra o de una frase y el objeto que se significa. Por ejemplo: “Las palabras del entrenador tuvieron una significación muy clara en el seno del grupo”, “El intendente habló durante horas con los familiares de la víctima, pero su discurso no tuvo ninguna significación para ellos”, “Habría que ver cuál es la significación que le quiso dar a su declaración”.
Cómo se construye la significación
Un signo lingüístico es la unidad mínima de la oración que está formada por un significado y un significante. Ambos se encuentran unidos en forma inseparable a través de la significación. Puede decirse que el significado es un concepto, mientras que el significante es una imagen acústica: la significación es la entidad de dos caras interdependientes que crean este concepto con su imagen acústica.
La significación se construye socialmente dentro de un determinado sistema lingüístico. El término “león” tiene significación como un mamífero carnívoro de la familia de los félidos. “León”, por lo tanto, es el significante de este animal por una convención.
Otro uso de la noción de significación está asociado a la importancia en cualquier orden: “Este título tiene una significación muy especial para el equipo y se lo queremos dedicar a los compañeros que ya no están con nosotros”.
El concepto en la estadística
En el campo de la estadística la significación de un resultado habla de la ausencia del azar. En este sentido, un resultado estadísticamente significativo no es necesariamente importante o relevante, sino innegable, posible de reproducir por métodos lógicos y exactos, a diferencia de un fenómeno impredecible.
La verificación de hipótesis (también llamada contraste, test y prueba de significación) es un método que permite determinar si una propiedad supuesta en una población estadística presenta compatibilidad con lo que se observa en una muestra de la misma. El nivel de significación de un test se puede definir como la probabilidad de decidir rechazar la hipótesis nula en el caso de que sea verdadera, lo cual se conoce con el nombre de error de tipo I.
Significación clínica
En la medicina, la acción de los profesionales debe estar abalada por estudios que puedan demostrar que la misma posee significación estadística, clínica y social. En este caso, la significación estadística sirve para detectar si la ocurrencia del fenómeno advertido ha tenido lugar por cuestiones propias del azar. Cuando se puede establecer que su aparición no es fortuita, entonces es posible decir que tiene significación estadística.
Por otro lado, la significación clínica es la evaluación de la utilidad de un tratamiento determinado y el acto de compararlo con otros, y se puede expresar de las siguientes maneras, entre otras: Riesgo, Riesgo Relativo, Reducción del Riesgo Relativo y Número Necesario a Tratar.
La significación de una enfermedad, por ejemplo, aparecen muchos elementos que combinan los conocimientos científicos con el sentido común y la cultura; algunos de ellos son los mitos, los miedos, las creencias y los estigmas, que no hacen otra cosa que distorsionar el enfoque que la atención médica debería tener.
Esto surge de la imagen que la sociedad adquiere de las enfermedades más conocidas, dado que la información a la que se expone no siempre puede comprenderse sin ciertos recursos técnicos. La significación que en la sociedad puede tener un fenómeno estudiado por la medicina suele ser muy diferente a aquélla que provoca en los científicos, y la diferencia no sólo se basa en la falta de conocimientos sino en la implicación de los sentimientos, en lugar de una mirada objetiva con vistas a encontrar una solución a los problemas.