Se denomina aristotelismo al pensamiento del filósofo griego Aristóteles. El término también alude al conjunto de los movimientos posteriores que se basaron en sus doctrinas.
Sistema filosófico de Aristóteles
Puede decirse que el aristotelismo es el sistema filosófico de este pensador de la Antigua Grecia y de los discípulos que mantuvieron sus postulados. Es importante mencionar que las ideas de Aristóteles ejercieron una enorme influencia en todo el mundo occidental.
Etapas del aristotelismo
Es habitual que se diferencie entre varias etapas del aristotelismo. El aristotelismo antiguo, en este marco, incluye al propio Aristóteles y a quienes asistían al Liceo (la institución donde Aristóteles daba clases, que también se conoce por el nombre de escuela peripatética). En esta etapa debemos destacar el trabajo de Teofrasto, quien organizó de manera sistemática el pensamiento de su maestro y llevó el Liceo hacia un rumbo de ciencia y naturalismo.
También a esta parte del aristotelismo perteneció Andrónico de Rodas, un importante seguidor de este sistema filosófico que llevó a cabo una edición crítica de las enseñanzas de Aristóteles. Si nos centramos específicamente en el campo de la medicina, el cual formaba parte de la rama científica del aristotelismo, no podemos dejar de hablar de Galeno, así como para la astronomía fue esencial Claudio Ptolomeo. Por último, en referencia al intelecto agente (la representación formal del intelecto), la figura destacada fue Alejandro de Afrodisia.
En el aristotelismo medieval, en tanto, encontramos el aristotelismo cristiano y el aristotelismo árabe. El aristotelismo cristiano fue impulsado por Tomás de Aquino y Alberto Magno, luego de que se prohibieran la física y la metafísica aristotélicas a principios del siglo XI. Magno y Aquino intentaron ofrecer un punto de vista que fuera acorde a los preceptos de la religión cristiana. Volviendo al aristotelismo árabe, tuvo exponentes como Averroes y Avicena. El primero hizo lo posible por recobrar el auténtico aristotelismo y propuso una interpretación del intelecto agente independiente de las almas individuales. Averroes, por su parte, fusionó el neoplatonismo con la filosofía de Aristóteles.
La tercera etapa se dio durante el Renacimiento, donde aparecieron más traducciones de la obra aristotélica. Sin embargo, sufrió una crisis que coincidió con la llegada y el crecimiento de la nueva ciencia. Jacobo Zabarella, Martín Nifo, Cesar Cremonino y Pietro Pomponazzi son pensadores que podemos destacar de aquella época crucial para el aristotelismo. Más cerca en el tiempo, el aristotelismo descubrió aliados en filósofos católicos como Paul Vignaux, Jacques Maritain y Étienne Gilson. Los mismos fueron responsables de haber reivindicado las ideas aristotélico-tomistas desde una visión que respetara las cristianas, y todo surgió del estudio en la universidad de Lovaina, cuando realizaron un profundo estudio de los conceptos.
La razón y otros conceptos
Cabe resaltar que, para los sectores más conservadores del catolicismo, el aristotelismo resulta peligroso. Esto se debe a que le otorga preponderancia a la razón sobre las revelaciones divinas.
Si analizamos ciertas características del aristotelismo cristiano podemos notar con facilidad algunos puntos fundamentales en los que sus seguidores buscaron una conciliación con el cristianismo. Si pensamos en dos conceptos que se oponen al averroísmo, podemos decir que el aristotelismo cristiano consideraba que el alma era inmortal y que el mundo no era eterno.
Con respecto a los puntos de vista opuestos a los del agustinismo, están los siguientes: el entendimiento se encuentra por encima de la voluntad; la razón tiene un predominio por sobre la intuición; no es necesaria la iluminación para alcanzar la verdad, sino que basta con la razón; la fe se diferencia claramente de la razón.
Puede señalarse que, entre los principales conceptos del aristotelismo, aparece la naturaleza como la esencia de los seres naturales que provoca su reposo o movimiento. Aristóteles también reflexionó sobre el alma como principio de vida y acerca de la virtud como aquello que permite a una entidad alcanzar su fin, por ejemplo.