La etimología de arroba nos remite a la lengua árabe, más precisamente a un término que puede traducirse como “cuarta parte”. De acuerdo a la primera acepción que menciona el diccionario elaborado por la Real Academia Española (RAE), una arroba es una unidad de masa cuyo peso equivale a 11,502 kilogramos (la cuarta parte de un quintal).
La arroba, como unidad de medida, dejó de emplearse a mediados del siglo XIX. De todos modos, todavía se emplea en sectores rurales e incluso como medida de un fluido cuyo peso depende de la región.
En la actualidad, la noción de arroba es muy popular en la informática. Arroba es el símbolo que se utiliza en una dirección de email (correo electrónico) para distinguir entre el nombre del usuario y el dominio al cual pertenece el servicio en cuestión.
La arroba (que muchas veces se expresa en masculino: el arroba) es un símbolo formado por una letra a con un círculo a su alrededor. En la lengua inglesa, se pronuncia como at, que puede traducirse como “en”. De este modo, la dirección de correo electrónico indica que la cuenta de un usuario X se encuentra alojada “en” un cierto servidor.
Redes sociales como Twitter e Instagram, por su parte, utilizan el símbolo de la arroba para nombrar a sus usuarios. Por ejemplo: @Definicion_de es el usuario de Twitter de Definicion.de. Si una persona comienza a seguir a @Definicion_de, por lo tanto, podrá leer en su línea de tiempo los tweets que publica este usuario.
La popularidad de la arroba ha crecido en los últimos años, precisamente gracias a la importancia que tiene su uso en dichas redes sociales, y poco a poco se ha desprendido de su exclusiva relación con el correo electrónico, ámbito en el que la mayoría de los usuarios la conoció a principios de los años 90. En los países de habla hispana, a diferencia de lo que ocurre en los de habla inglesa, se lee por su nombre y no tiene una connotación que nos ayude a entender por qué la usamos, con lo cual las personas ajenas a la informática han tenido que esforzarse más para acostumbrarse a ella.
Otro signo que se ha vuelto muy común gracias a la masificación de las redes sociales es el numeral (#), el cual en inglés se llama hashtag. En este caso, sí se ha generalizado la pronunciación anglosajona en casi todo el mundo, aunque con ciertas concesiones para ajustarse a las características fonéticas de cada idioma. De todos modos, tanto la arroba como el numeral son sinónimos de comunicación, de tendencias, de «estar al día».
Escribir la arroba es una acción que puede presentar ciertas dificultades, aunque sean menores, especialmente en el ordenador y a mano. Si bien los teléfonos nos presentan siempre el símbolo cuando puede resultar necesario, como por ejemplo a la hora de ingresar nuestra dirección de correo electrónico o realizar una búsqueda de un usuario en una red social, los teclados de ordenador presentan un desafío extra: exigen la combinación de dos teclas para generarla.
Esto puede acarrear confusiones a los usuarios menos expertos, en especial a aquellas personas que se hayan acercado a la informática a través de los teléfonos móviles. Pero la complicación aumenta cuando el teclado está configurado en un idioma diferente del que usa el sistema operativo, ya que entonces es muy probable que de nada nos sirva observar los signos y símbolos impresos sobre sus botones, sino que debamos memorizar la combinación adecuada. Dibujarla también es difícil para algunas personas, tanto como el signo &, que se denomina et o, según su nombre en inglés, ampersand.
