Bífido es un adjetivo que se utiliza para calificar a aquello que tiene una bifurcación o, en el ámbito de la biología, a lo que se encuentra hendido en dos sectores o porciones. La raíz etimológica del término se halla en el vocablo latino bifĭdus.
Se conoce como espina bífida a una malformación de la espina dorsal, también llamada columna vertebral. Esta malformación es congénita: ya está presente en el momento del nacimiento.
Cabe recordar que la espina dorsal es el eje del esqueleto de los seres vertebrados. Se compone de diversos huesos cortos llamados vértebras, que se articulan entre sí. En el caso de la espina bífida, la espina dorsal presenta una protrusión (un fragmento que sale de sus límites normales) en su extremo.
Origen de la espina bífida
La espina bífida se produce cuando, al finalizar el primer mes de la vida embrionaria, el tubo neural no se cierra por completo. Con el paso del tiempo, las últimas vértebras de la espina dorsal tampoco se cierran completamente, lo que genera la mencionada protrusión.
Aunque muchas veces su causa no puede determinarse, es habitual que la espina bífida se genere cuando la madre arrastraba un nivel reducido de ácido fólico en los meses anteriores al embarazo. Otro dato a tener en cuenta es que no se trata de un trastorno hereditario.
Clasificación según el tipo
La espina bífida puede ser abierta (también llamada quística) u oculta. En el caso de la espina bífida abierta aparece como un bulto en la espalda.
La espina bífida oculta, en cambio, suele verse como una mancha o un hoyuelo y la persona puede no advertir esta condición.
Consecuencias de la espina bífida
Algunas de las posibles consecuencias de la espina bífida, que puede revertirse parcialmente a través de una intervención quirúrgica, son las siguientes:
- Acumulación en exceso de líquido cefalorraquídeo en el cerebro, fenómeno que se conoce con el nombre de hidrocefalia y que, por su parte, acarrea un alto grado de presión en lo tejidos del cerebro que pueden llegar a perjudicarlo. Este líquido también se denomina cerebroespinal y baña la médula espinal y el encéfalo. Una de sus características principales es que no posee color.
- Diversos trastornos neurológicos que suelen estar relacionados con la hidrocefalia.
- Una enfermedad llamada malformación de Arnold Chiari, que se caracteriza por el movimiento descendente de una parte del cerebelo, aunque a veces de casi toda su masa, por el agujero occipital mayor. Esto comprime el tronco encefálico y puede aparecer en compañía de un incremento en la cantidad de líquido cefalorraquídeo en el cráneo.
- Un trastorno denominado siringomielia, que consiste en la formación de un quiste en el interior de la médula espinal, conocido como siringe, el cual se extiende y se expande con el paso del tiempo, pudiendo destruir la parte central de la médula. Dada la conexión que existe entre ésta y los nervios de nuestras extremidades, es común que aparezcan rigidez, debilidad y dolores en los hombros, las piernas, los brazos o la espalda.
- Dificultad para concentrarse, problemas de visión y trastornos de memoria.
- Anomalías en el aparato locomotor.
- Parálisis o debilidad muscular.
- Disminución de la sensibilidad en la zona inferior a la lesión (en algunos casos, puede ser total).
- Alteraciones en el control del intestino y el sistema genito-urinario, que pueden manifestarse en forma de incontinencia, tanto vesical como fecal, o bien en la situación opuesta, es decir, la retención. Como el vaciamiento vesical deficiente suele acarrear infecciones urinarias, es normal que el paciente deba someterse a un sondaje.
La lengua de las serpientes
La lengua bífida, por otra parte, consiste en una bifurcación del órgano.
Las serpientes presentan una lengua bífida de manera natural, mientras que hay seres humanos que se someten a una operación para lograr esta característica.