Se denomina ciruela al fruto del ciruelo. El término tiene su origen etimológico en el vocablo latino cereŏla.
El ciruelo es un árbol frutal que forma parte del conjunto familiar de las rosáceas. Puede alcanzar una altura de unos siete metros, presenta hojas puntiagudas y con dientes y dispone de flores de color blanco.
La ciruela es un alimento muy apreciado por sus propiedades.
Características de la ciruela
Como ya indicamos, al fruto del ciruelo se lo llama ciruela. Se trata de una drupa ya que tiene una única semilla, su endocarpio es leñoso y su mesocarpio, carnoso.
Antes de avanzar, es importante mencionar que el pericarpio es la parte de los frutos que envuelve la semilla. Se pueden reconocer tres capas en el pericarpio: el endocarpio (la capa interna), el mesocarpio (la capa media) y el epicarpio (la capa externa).
En el caso de la ciruela, la capa media (o sea, el mesocarpio) se destaca por su carne jugosa y generalmente dulce, mientras que su capa interna (el endocarpio) es muy dura. Otra particularidad es que la capa externa (el epicarpio) se puede separar con facilidad del estrato medio.
De todas formas, hay que tener en cuenta que existen múltiples tipos de ciruelas debido a las variedades de ciruelos. Por eso las ciruelas pueden tener diferentes tamaños, colores y formas.
La carne de la ciruela, en este marco, puede ser roja, blanca, amarilla o verde. Los sabores y las texturas también varían. La ciruela damascena, por ejemplo, resulta agria, mientras que la ciruela claudia es dulce. La ciruela de fraile, la ciruela de Génova, la ciruela de corazoncillo, la ciruela de yema y la ciruela de pernigón son otras de estas frutas.
Existen múltiples tipos de ciruelas.
Sus propiedades
El consumo de ciruelas favorece el tránsito intestinal. Por su efecto laxante, se recomienda su ingesta para prevenir o aliviar el estreñimiento.
Además de un alto nivel de fibra, las ciruelas aportan vitaminas K, C y A y minerales como zinc, fósforo, potasio, hierro y calcio.
Gracias a sus componentes, las ciruelas ayudan a reforzar el sistema inmunológico, contribuyen a combatir la anemia, alivian la hipertensión y mejoran la circulación sanguínea. Por supuesto, estos beneficios no se logran solo comiendo ciruela, sino incluyendo a esta fruta en una dieta equilibrada y combinando su consumo con otras acciones (como la actividad física frecuente). En cualquier caso, un médico es el especialista que debe indicar cómo desarrollar la prevención y el tratamiento de los trastornos de salud, mientras que un nutricionista es el profesional apto para sugerir hábitos de alimentación.
Las ciruelas pasas
A la ciruela deshidratada se la conoce como ciruela pasa. Para la obtención de ciruelas pasas, la ciruela es sometida a un proceso de secado, convirtiéndose de este modo en una fruta desecada o fruta seca.
La deshidratación de la ciruela apunta a potenciar su sabor y, sobre todo, a extender su conservación. Tiempos atrás, se recurría a los rayos del sol para lograr la desecación, pero hoy es frecuente que se apele a otros métodos (como el uso de hornos).
Si bien las ciruelas se emplean como laxantes, las ciruelas pasas resultan aún más eficaces. Esto se debe a que concentran el sorbitol (un carbohidrato) y la fibra.
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