Para conocer a fondo el término que ahora nos ocupa, se hace necesario proceder a descubrir su origen etimológico. En este caso podemos exponer que deriva de la palabra catalana “congoixa”, la cual, a su vez, procede de la latina “congustia”. Una palabra esta última que es fruto de la suma de dos partes diferenciadas:
-El prefijo “con-”, que significa “junto”.
-El sustantivo “angustia”, que es sinónimo de “angustia” y de “ahogo”.
El término congoja alude a la zozobra, la tristeza o la angustia. Quien tiene congoja padece un malestar anímico. Por ejemplo: “Congoja por el fallecimiento de la actriz”, “Quebrada por la congoja, la mujer se recostó en el sofá, sin ganas de hacer nada”, “Con gran congoja tuve que informarles a los trabajadores que la empresa cerrará sus puertas por los problemas económicos”.
La congoja es una emoción común, que surge ante determinadas situaciones que provocan dolor. El sentimiento puede ser exteriorizado a través del llanto o permanecer en el interior del individuo.
Por lo general la congoja aparece ante la incertidumbre y está vinculada a la ansiedad. Cuando una persona es despedida de su trabajo, por citar un caso, puede sentir congoja ya que le preocupa cómo podrá satisfacer sus necesidades materiales sin recibir un salario. El futuro, con este panorama, resulta incierto y hace que el sujeto tenga dificultades para manejar la ansiedad. Esa carga negativa puede traducirse en distintas emociones negativas, entre ellas la congoja.
En algunas personas, la congoja se asemeja a la fatiga o al desgano, haciendo que quien padece la emoción desee quedarse en su casa o en la cama la mayor parte del tiempo. Otros acongojados, en cambio, se mueven de manera excesiva y frenética, sin poder controlar la ansiedad.
Para poder superar esa congoja, se deben tener en cuenta una serie de consejos y recomendaciones tales como estos:
-La persona debe reconocer que la está sufriendo y también el motivo que se la causa.
-Por supuesto, tiene que ser más cariñosa consigo misma, quererse y mimarse un poco más.
-No hay que “cerrarse en banda” a los demás. Hay que confiar en los seres queridos y pedir ayuda y apoyo.
-Para poder superar la congoja es fundamental que la persona sea consciente de su situación, de la causa que se la ha provocado y también que tenga claro que quiera superarla.
Sentir congoja en determinados momentos o situaciones es normal: se trata de una reacción ante algo que nos afecta. Pero si dicha emoción se extiende demasiado o se conjuga con otras similares, la persona puede requerir asistencia psicológica para salir adelante.
Además de todo lo expuesto, no podemos pasar por alto tampoco que congoja es el nombre de una planta medicinal oriunda de México que es muy utilizada. Así, de la misma podemos destacar que se procede a emplear cociendo sus hojas porque estas van a servir tanto para curar heridas en la garganta como para acabar con los dolores de oído e incluso para sanar úlceras sangrantes.
