Las directrices suelen transmitirse en un marco jerárquico.
Una directriz es una norma o una instrucción que se tiene en cuenta para realizar una cosa. También se trata de aquello que fija cómo se producirá algo. Las directrices, por lo tanto, sientan las bases para el desarrollo de una actividad o de un proyecto.
Por ejemplo: “El entrenador dio las directrices al capitán para que el equipo juegue en el campo rival”, “El gerente está reunido con el dueño de la empresa para determinar las directrices a seguir”, “Sin directrices, esta organización nunca podrá cumplir con sus objetivos”.
TemasTransmisión de directrices
Las directrices, por lo general, son transmitidas en el marco de una jerarquía. Quienes ocupan los puestos superiores se encargan de desarrollar y transmitir las directrices a los subordinados. De esta manera, en una empresa, el gerente, el presidente o el dueño es quien decide las directrices y las comunica a los empleados.
Es posible, de todos modos, que las directrices se decidan a través del diálogo y el consenso. Una reunión entre distintos integrantes de una empresa puede derivar en el establecimiento de las directrices a seguir en los meses siguientes.
En el ámbito laboral, lo habitual es que los jefes indiquen directrices a sus subordinados.
El ejemplo de las Naciones Unidas y el delito juvenil
Para citar un ejemplo práctico, en el año 1990 las Naciones Unidas adoptaron y proclamaron una serie de directrices para promover la prevención de los actos delictivos por parte de los jóvenes. En principio, se basan en que la juventud representa el futuro de la sociedad, por lo cual es imperioso incentivarla a explorar sus capacidades y a encausar sus vidas de una forma productiva para que se conviertan en adultos responsables, que sigan una línea de conducta que respete sus propios derechos y los del resto de los ciudadanos.
No se debe desestimar, sin embargo, la importancia de respetar a los jóvenes para luego exigir lo mismo de su parte. Ya desde la infancia es imprescindible inculcar en los niños que su presencia en la sociedad no pasa desapercibida; que sus actos, su manera de relacionarse, sus ideas repercuten en su entorno. Por otro lado, en este documento se reconoce que las actitudes desafiantes son comunes a la mayoría de las personas cuando alcanzan la adolescencia, y que si se recibe la guía adecuada tienden a desaparecer con la llegada de la adultez.
Algunos de los puntos fundamentales giran en torno al desarrollo de planes educativos para ayudar a divulgar los objetivos de la propuesta, sobre todo entre los sectores más necesitados de la población. Se intenta formar para prevenir el acto criminal y la inevitable sanción, que muchas veces es la mayor causante de resentimiento en los jóvenes, y los incita a continuar por el camino del delito.
Es importante tener en cuenta que un castigo duro puede parecer justo para la parte que lo impone, pero excesivo e inesperado para quien lo recibe. Además, las humillaciones a las que se deben someter en los centros de corrección alimentan su ira contra la sociedad y los obliga, irónicamente, a continuar aprendiendo los códigos del mundo criminal para sobrevivir. Para no llegar a dichas instancias, las directrices se centran en la orientación y en la creación de una consciencia de respeto y convivencia armoniosa en la infancia.
Directrices en las matemáticas
Para la geometría, se conoce como directriz a una línea o una figura que produce la determinación de las propiedades de otra figura o línea (que recibe el nombre de generatriz). La generatriz, que depende de la directriz, puede tratarse de una línea recta o curva que forma una figura geométrica.
Cuando la generatriz toma la forma de una línea del tipo recta que gira alrededor de otra recta directriz, se crea una superficie cilíndrica o cónica. En cambio, si la generatriz es una curva, produce elipsoides o esferas.
