Para poder conocer el significado del término gripe se hace necesario, en primer lugar, descubrir su origen etimológico. En este caso, podemos exponer que se trata de una palabra que deriva del francés, concretamente de “grippe” que, a su vez, emana del franco “grip”, que puede traducirse como “garra”.
Así se denomina a una enfermedad contagiosa cuyas manifestaciones son variadas, aunque se caracteriza por la fiebre y el catarro.
También conocida como gripa, la gripe puede ser provocada por distintos virus del género influenza, que pertenece a la familia Orthomyxoviridae. Se trata de un trastorno epidémico o pandémico que se distribuye de acuerdo a patrones estacionales.
El contagio de la gripe se produce por la expulsión de gotas de saliva o secreciones nasales que realizan las personas ya infectadas al hablar, toser o estornudar. Por lo general, la gripe afecta a las vías respiratorias.
Entre las medidas que se pueden para intentar prevenir la gripe podemos destacar algunas tales como las siguientes:
-No compartir alimentos, bebidas o cubiertos con una persona que ya tenga la enfermedad.
-Lavarse adecuadamente las manos varias veces al día con agua y con jabón.
-Ventilar bien las habitaciones de la casa si se está viviendo con alguien que tenga la gripe.
Muchas veces está enfermedad se confunde con un resfrío o resfriado, ya que sus síntomas son similares. En el caso específico de la gripe, suele presentarse con fiebre, cefalea, mialgias, dolor de garganta, tos sin mucosidad y malestar generalizado.
Es habitual que la gripe se resuelva con el transcurso de los días sin necesidad de una intervención médica. Sin embargo, la enfermedad puede agravarse y, en ciertos casos extremos, hasta provocar la muerte. Por eso es recomendable consultar con un profesional ante la aparición de los síntomas.
El tratamiento habitual de la gripe consiste en la indicación de reposo y de consumo abundante de líquido. Pueden suministrarse fármacos para aliviar los síntomas, aunque los antivirales se reservan para pacientes con un riesgo elevado de sufrir complicaciones.
De la misma manera, además de guardar reposo y de tomar mucho líquido, hay otra serie de medidas que se pueden llevar a cabo en pro de dejar atrás la gripe. Nos estamos refiriendo a algunas tales como las siguientes:
-Llevar a cabo una alimentación sana, completa y equilibrada. Asimismo, hay que establecer que hay que tomar muchos productos ricos en vitaminas y en minerales.
-Evitar el consumo de alcohol.
-Dejar de lado el tabaco y evitar los lugares donde haya humo.
-Hay que evitar tener frío y también estar expuestos a espacios donde hay humedad.
-Hay que dormir las horas suficientes.
-Se pueden hacer gárgaras con mezclas de agua caliente, limón y miel.
-Bajo ningún concepto hay que tomar antibióticos porque estos medicamentos no sirven para hacerle frente a la gripe.
Cabe destacar que existen vacunas contra la gripe, destinadas generalmente a los sectores más vulnerables (niños pequeños, ancianos, inmunodeprimidos, etc.). El cuidado de la higiene, por otra parte, también es un mecanismo útil de prevención ya que dificulta la propagación del virus.