El kung fu, aceptado por la Real Academia Española (RAE) como kung-fu o kungfú, es un arte marcial similar al karate, cuyos orígenes se encuentran en China. La etimología del concepto remite a gongfu, un vocablo chino formado por gong (que puede traducirse como “mérito”) y fu (que quiere decir “maestro”).
Las raíces del kung fu se remontan al siglo VI. Suele señalarse como el impulsor de la disciplina al monje budista Bodhidharma, quien solía imitar los movimientos de los animales a modo de ejercicio. Bodhidharma habría sido quien introdujo este arte marcial en el monasterio de Shaolin.
Hay en China suficientes evidencias como para situar los orígenes del kung fu miles de años en el pasado. Entre los antiguos tratados de lucha y táctica del ámbito militar chino que podrían probar su existencia en aquella época destaca el titulado El arte de la guerra, que precisamente data del siglo VI a. C.
De manera complementaria, podemos decir que la filosofía también formaba parte de la cultura china durante los primeros siglos después de Cristo, y esto incluye el budismo, el taoísmo y el confucianismo. Esto se relaciona con el kung fu porque los expertos consideran que las artes marciales chinas no surgen de la lucha cuerpo a cuerpo sino de la filosofía, o sea, que son sus principios filosóficos los que le dan forma.
Todo esto nos lleva al año 527, cuando se cree que el monje budista llamado Bodhidharma visitó por primera vez el monasterio Shaolin, al norte de China. Bodhidharma creía que los monjes se beneficiarían en sus prácticas espirituales si cuidaban su salud física. Por esta razón les enseñó diversos ejercicios que les serían útiles en sus meditaciones y de allí surgieron los «18 ancestros LouHan«, también llamados las «18 manos de LouHan«.
Con el paso del tiempo, estos ejercicios se convirtieron en técnicas propias de la lucha. De hecho, veinticuatro nuevos movimientos surgieron de ellos, y esto fue tan sólo el comienzo de una serie de estilos diferentes que poco a poco le dieron forma a lo que hoy conocemos con el nombre de kung fu. Hay quienes aseguran que antes de la llegada de Bodhidharma al monasterio, los monjes ya conocían algunas de estas habilidades.
Es importante considerar que no existe un único kung fu, sino que hay muchas modalidades. A nivel general se trata de un arte marcial que también es una filosofía de vida ya que se rige por principios morales y acarrea un código de conducta. Su evolución está íntimamente ligada con la historia de su cultura, y por eso se aprecian hitos que coinciden con los de los momentos más importantes de China. A pesar de tratarse de un arte tan antigua, su evolución no ha terminado, sino que incluso en la actualidad continúa teniendo lugar.
Como disciplina de combate, el kung fu es muy completo. Su práctica contempla la lucha cuerpo a cuerpo, diversas clases de golpes e incluso la utilización de determinadas armas, como bastones y espadas.
En la cultura occidental, el kung fu se popularizó en la década de 1970 gracias a una serie de TV estadounidense, llamada justamente “Kung fu”. El personaje central era Kwai Chang Caine, un monje shaolin que interpretó David Carradine.
El trabajo de actores como Bruce Lee y, más adelante, Jackie Chan y Jet Li también ayudó a difundir el kung fu. Muchas películas se basan en combates que se desarrollan siguiendo las técnicas de este arte marcial oriental.
El kung fu incluso llegó a la animación, siendo “Kung Fu Panda” uno de los filmes más famosos. Esta cinta estrenada en 2008 tiene a un oso panda como protagonista.
