La mandíbula se compone de las piezas cartilaginosas u óseas que constituyen la cavidad oral de los animales vertebrados. Este término es un sustantivo cuyo origen etimológico se encuentra en el latín, más precisamente en el vocablo mandibŭla.
Se llama mandíbula a cada una de dichas piezas, en las cuales se insertan los dientes. En el caso de los seres humanos, el concepto suele referirse específicamente a la mandíbula inferior, también conocida como maxilar inferior.
Fractura mandibular
Cuando se produce una rotura de la mandíbula, se habla de fractura mandibular. En pocas palabras, cualquier interrupción en la continuidad de su hueso entra en esta categoría. Con respecto a su repercusión, puede impactar negativamente en todas las partes de la mandíbula, es decir a sus ramas y a su cuerpo, o bien a una de ellas. Por lo general, viene acompañada de una anomalía en la oclusión dental (el contacto entre los dientes).
La mayoría de las veces la fractura mandibular es causada por un golpe, como puede ocurrir al caer al suelo o sobre algún obstáculo sobre el mentón o uno de los costados de la zona maxilar. Si bien no es tan común, también es posible que se genere por un tumor o por necrosis avascular (una enfermedad que se caracteriza por la ausencia de sangre en la zona interna de un hueso, ya sea pasajera o permanente, lo que causa su muerte y colapso).
Mientras que en el pasado se usaban únicamente las radiografías (los rayos X) para diagnosticar una fractura de mandíbula, hoy en día son más comunes las tomografías computarizadas. Con respecto al tratamiento, la cirugía es muy normal, aunque no siempre debe hacerse de forma inmediata. En este punto también existen varias posibilidades, como la fijación interna de reducción abierta y la maxilomandibular. También se suele administrar penicilina y otros antibióticos a lo largo de unos días.
Partes de la mandíbula
Las dos partes principales de la mandíbula son el cuerpo y las ramas. El primero cóncavo y tiene un aspecto similar al de una herradura; podríamos decir que es la parte que se encuentra paralela al suelo cuando estamos erguidos. Las ramas surgen de los extremos traseros del cuerpo y se elevan a un ángulo que ronda los 15 grados. Cada una de ellas tiene dos estructuras, donde se inserta el músculo temporal.
En el cuerpo encontramos la cara anterior y la posterior, además del borde superior y el inferior. La división de las ramas también nos presenta dos caras, la externa y la interna, pero cuatro bordes: el superior, el inferior, el anterior y el posterior. Algunos músculos relevantes de ambas partes de la mandíbula son el triangular de los labios, el geniogloso, el digástrico, el masetero y el pterigoideo interno.
Mandíbulas de animales
En los animales invertebrados, las mandíbulas son las piezas de gran dureza que presentan en la boca y que emplean para la trituración de los alimentos. Estos apéndices tienen diferentes características según la especie: hay mandíbulas masticadoras, mandíbulas filosas, etc.
Si nos centramos en las aves, que son animales vertebrados, las mandíbulas son los elementos córneos que componen su pico. Cada ave tiene dos mandíbulas (la mandíbula inferior y la mandíbula superior), muchas veces protegidas por un revestimiento denominado ranfoteca.
Obras tituladas Mandíbula
“Mandíbula”, por otro lado, es el título de una novela escrita por Mónica Ojeda. La autora ecuatoriana publicó este libro, que alcanzó la instancia final del Premio Bienal de Novela Mario Vargas Llosa, en 2018.
Más atrás en el tiempo, en 1974, el estadounidense Peter Benchley presentó “Jaws”, una novela que en castellano se conoció como “Mandíbulas”, “Fauces” o “Tiburón”. Esos mismos títulos tuvo la adaptación cinematográfica que contó con la dirección de Steven Spielberg.