Antes de entrar de lleno en el significado del término mesa de trabajo vamos a proceder a conocer el origen etimológico de las dos palabras que le dan forma:
-Mesa, en primer lugar, deriva del latín. En concreto, emana de «mensa», que puede traducirse como «mesa».
-Trabajo, en segundo lugar, procede del verbo trabajar que, a su vez, emana de «tripalium». Este término se usaba para hacer mención a una especie de yugo compuesto de tres palos que se usaba en la Antigüedad para amarrar a los esclavos y azotarlos.
El término mesa alude a una pieza de mobiliario compuesta por una o más patas que sostienen un tablero horizontal. El trabajo, por otra parte, consiste en el desarrollo de una actividad intelectual o física.
La idea de mesa de trabajo, por lo tanto, refiere al mueble que se utiliza en el contexto del ejercicio de un oficio o de una profesión. Las características de este producto dependen de la labor a realizar sobre ella.
Más allá de las diferencias, todas las mesas de trabajo deben contar con ciertas propiedades para resultar útiles. Por un lado, tienen que disponer de la superficie suficiente para que el usuario pueda trabajar de forma cómoda. Además la mesa de trabajo debe ser firme para minimizar los errores y el riesgo de accidentes.
Las mesas de trabajo también suelen disponer de divisiones o compartimientos. Esta particularidad posibilita el almacenamiento ordenado de herramientas y accesorios.
La ubicación de la mesa de trabajo es otra cuestión clave. Debe situarse en un lugar accesible y bien iluminado, con conexión eléctrica en sus proximidades.
Entre los profesionales que se identifican por disponer de una mesa de trabajo se encuentran los carpinteros, los ebanistas o los que realizan tareas de bricolaje.
De la misma manera, también se habla como mesa de trabajo a la mesa que se utiliza para realizar labores de oficina. En este caso, la misma es necesario que disponga de una óptima lámpara para que la vista no se dañe, es recomendable que cuente con una bandeja extraíble, si se va a utilizar para trabajar con un ordenador, y también es adecuado que cuente con colores suaves para facilitar la concentración.
Es importante destacar que la noción de mesa de trabajo también se usa en sentido simbólico. En este marco, así se denomina a un encuentro o una reunión donde los participantes se juntan para intercambiar conocimientos y experiencias y para ejecutar proyectos.
Estas mesas de trabajo suelen realizarse de manera periódica. El objetivo es favorecer el diálogo entre los asistentes, buscando que las personas aprendan a partir de los debates y las charlas y luego puedan volcar los nuevos conceptos en su actividad.
Para organizar y celebrar este tipo de mesas de trabajo hay que saber que lo recomendable es que estén formadas por un mínimo de cuatro personas y un máximo de diez. Además, tiene que existir un coordinador y un vocal y de las mismas deben salir unos informes que permitan determinar las tareas que se realizarán como proyectos a partir de los acuerdos adoptados.