Una negociación colectiva es un proceso que desarrollan las organizaciones que representan a los trabajadores y las agrupaciones de empresarios para acordar condiciones laborales. Cuando las partes alcanzan un acuerdo, lo habitual es que firmen un convenio.
Cabe destacar que una negociación es el acto y el resultado de negociar: un verbo que puede referirse, entre otras cuestiones, a tratar una cuestión para resolverla, concretarla, etc. Lo colectivo, en tanto, alude a lo grupal o comunitario.
Puede decirse que la negociación colectiva es llevada adelante por los sindicatos y los empleadores para establecer acuerdos laborales. Los convenios colectivos resultantes de las negociaciones permiten regular el vínculo entre ambas partes y brindan un marco normativo.
Características de la negociación colectiva
La negociación colectiva es un mecanismo voluntario que funciona como una mesa de diálogo para resolver conflictos laborales y establecer distintas pautas en el ámbito del trabajo. Lo que se acuerda se aplica al conjunto de los trabajadores del sector en cuestión.
En este espacio de diálogo social, la representación sindical defiende los derechos laborales, mientras que la organización patronal promueve los intereses de los empresarios. Como recurso para exigir la apertura de la negociación colectiva o cuando consideran que el pacto no está siendo respetado, los trabajadores pueden recurrir a una huelga o un paro laboral.
Es importante considerar que la negociación colectiva está garantizada por la Constitución de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Asimismo se la toma como un derecho fundamental que forma parte de la libertad sindical (es decir, de la posibilidad que tienen los trabajadores de agruparse y organizarse libremente para la defensa de sus intereses en común).
Su importancia
Los convenios colectivos que derivan de las negociaciones resultan trascendentales para la regulación de las responsabilidades y los derechos de ambas partes en un vínculo laboral. En una negociación colectiva se examinan las condiciones de trabajo y se buscan acuerdos sobre las mismas para que las relaciones se desarrollen en armonía.
Para el conjunto de trabajadores involucrados en la negociación colectiva, el proceso es clave para salvaguardar sus derechos y conseguir mejoras. Para los empresarios, en tanto, el procedimiento posibilita dotar de estabilidad a las condiciones de producción.
En el programa de una negociación colectiva suelen contemplarse puntos como el salario mínimo, la extensión de la jornada laboral, la salud en el trabajo y la formación profesional. También se intenta instaurar principios como la igualdad de oportunidades y la no discriminación.
Tipos de negociación colectiva
En los convenios de la OIT se reconocen cuatro tipos de negociación colectiva. La negociación colectiva por actividad genera convenios que se aplican a todas las empresas de un sector (como la industria farmacéutica o la metalurgia, por mencionar dos posibilidades).
La negociación colectiva por empresa, en cambio, se da entre los sindicatos y los empleadores dentro de una compañía específica. Si la negociación colectiva es territorial, sus efectos tienen injerencia en una región, mientras que si la negociación colectiva es nacional, su alcance se extiende a la totalidad del territorio de la nación.
Paso a paso
El desarrollo de una negociación colectiva supone la puesta en marcha de una serie de pasos. Estas fases son sucesivas.
Existe una primera etapa que, en realidad, antecede a la propia negociación: la preparación. En esta instancia las partes determinan cuáles son los puntos que pretenden abordar y con qué objetivos. Por lo general en las acciones preparatorias intervienen expertos en derecho laboral (o sea, con amplios conocimientos acerca de la legislación laboral en vigencia).
Luego llega el desarrollo en sí mismo. Los sindicatos y los empleadores se reúnen para presentar y defender sus respectivas posiciones. En el proceso se realizan ofertas y contraofertas hasta lograr un acuerdo.
Finalmente la negociación colectiva se completa con su cierre que suele consistir en la firma del convenio colectivo. Dicho documento recoge aquello que se determinó en las conversaciones.
Cuando la negociación colectiva fracasa y no hay acuerdo, la presión sindical para que los trabajadores consigan lo que pretenden puede incluir una movilización social con manifestaciones públicas, piquetes y bloqueos. Es posible que el Estado cuente con la potestad de dictar una conciliación obligatoria a través del Ministerio de Trabajo u otro organismo, forzando a las partes a acatar determinadas disposiciones.
Ejemplos de negociación colectiva
Supongamos que los dos sindicatos que representan a los trabajadores de la industria aceitera plantean la necesidad de mejorar las condiciones laborales. Así inician una negociación colectiva con la federación que reúne a las empresas del sector. Ante la falta de acuerdo, los sindicatos comienzan a tomar medidas de fuerza, como paros y cortes de rutas (carreteras). Frente a esta realidad, el gobierno dicta la conciliación obligatoria e insta a las partes a conducirse con buena predisposición para dejar de lado las diferencias. Semanas después, y tras una revisión de las posiciones, la negociación colectiva concluye con un pacto que se plasma en un nuevo convenio de trabajo.
Otro ejemplo de negociación colectiva es el proceso de diálogo que entablan los gremios que representan a los docentes de escuelas públicas con el gobierno de una provincia. Los maestros demandan un incremento salarial por encima de la inflación, un pedido que finalmente es aceptado por la gestión provincial y la situación se resuelve sin conflicto.