Señuelo es un término cuyas primeras acepciones que menciona el diccionario de la Real Academia Española (RAE) están vinculadas a las aves y a la cetrería. Un señuelo puede ser una figura que busca atraer a un halcón que remontó vuelo o, directamente, un ave que se emplea para la atracción de más aves.
En el contexto de la cetrería (la disciplina que consiste en la caza empleando aves de presa), el señuelo es una pieza utilizada para el adiestramiento de los animales. También se emplean figuras como señuelos de pesca y señuelos de caza.
En la caza, el señuelo se emplea para atraer a la presa.
TemasSeñuelos en la caza y la pesca
Supongamos que una persona desea cazar un alce. El cazador puede construir un señuelo que imite la apariencia del animal y hacer ruido para llamar la atención de los alces y atraerlos al lugar.
En el ámbito de la pesca es muy habitual el uso de señuelos. Tanto es así que hay una gran cantidad de variedades y tipos para satisfacer las necesidades de cada pescador y para atrapar a unas presas u otras. No obstante, por regla general, los señuelos se suelen clasificar en dos grandes grupos: los naturales y los artificiales.
Los señuelos se emplean en la pesca.
Su uso por parte de la Policía
Por extensión a estos significados, se denomina señuelo a todo aquello que se utiliza para inducir a algo o atraer a alguien a través de una mentira o de un engaño. Los señuelos suelen ser empleados por la Policía para atrapar criminales.
Con el objetivo de capturar a un pedófilo que busca sus víctimas en Internet, por ejemplo, la Policía puede hacer que un agente se haga pasar por un niño en las redes sociales. De este modo, el policía actúa como un señuelo y logra acordar una cita con el delincuente. Cuando el pedófilo acude al encuentro pensando que iba a reunirse con un menor de edad, es atrapado.
Las fuerzas de seguridad también pueden usar señuelos con el intención de atrapar a un vendedor de drogas o a un asesino serial que respeta ciertos patrones a la hora de elegir a sus víctimas.
Señuelos en la aviación y el marketing
Dentro del ámbito de la aviación también se recurre a la utilización de señuelos. En concreto, el término se emplea para hacer referencia a un tipo de bengala que es la encargada de que misiles guiados por sensores de infrarrojos la sigan a ella y no a las aeronaves que intentan destruir. A ese recurso técnicamente se lo conoce como contramedida de infrarrojos.
Por otro lado, en el sector del marketing tenemos que resaltar la existencia del efecto señuelo. Se trata de un fenómeno consistente en que los consumidores proceden a hacer un cambio en la preferencia entre dos opciones cuando aparece en escena una tercera alternativa que se califica como asimétricamente dominante. Esta tercera propuesta tiene unas prestaciones inferiores a las de una de las alternativas, por la que se quiere que los usuarios se decanten por la segunda opción que había en un principio.
De esta manera, lo que se logra es que el consumidor no tenga ningún duda en optar por una opción, la que se deseaba que fuera su preferida.
