El concepto de desfase, en su sentido más amplio, alude a un desajuste, un desacople o una desarticulación. Un desfase es una diferencia que se registra entre dos elementos que, por lo general, son concordantes o deberían serlo.
Por ejemplo: «Actualmente existe un notorio desfase entre el nivel de ingresos de la población y los precios», «La Justicia investiga un desfase millonario en las cuentas provinciales», «Las obras no se pudieron terminar en el plazo anunciado porque hubo un desfase en la entrega de los materiales».
En el ámbito de la física, la idea de desfase refiere a una diferencia de fase. Esta situación alude al estado que presentan dos magnitudes que no son simultáneas pero que tienen periodos iguales. El desfase es la diferencia que se registra en las fases de las magnitudes consideradas.
Se llama desfase horario, por otra parte, a la diferencia existente en el horario de dos lugares. Supongamos que, cuando en una ciudad el reloj marca las 10 horas, en otra localidad son las 15 horas. Existe, por lo tanto, un desfase horario de cinco horas entre ambos sitios.
En relación a este significado de desfase tenemos que establecer que existe un problema de salud que responde al nombre de desfase horario. En concreto, es un trastorno del sueño que pueden sufrir aquellas personas que viajan a distintos lugares del mundo que se encuentran en distintas zonas horarias. Y eso se produce porque el cuerpo de los citados ciudadanos tiene un ritmo circadiano que es el que marca cuándo hay que dormir e incluso cuándo levantarse de la cama.
Esa «confrontación» entre lo que establece el organismo y los distintos horarios que afronta trae consigo que el individuo en cuestión no solo presente problemas para conciliar el sueño sino que, además, sienta cansancio durante todo el día, pueda sufrir dolores de cabeza, se muestre muy irritable, sufra dolores estomacales e incluso tenga una sensación generalizada de no encontrarse bien.
Para poder hacerle frente a ese desfase horario tiene que comer sano, hacer ejercicio, descansar mucho, beber abundante agua y evitar los excitantes.
Cabe destacar que el término desfase también puede mencionarse como desfasaje. Aunque desfasaje no forma parte del diccionario de la Real Academia Española (RAE), sí es recogido en el Diccionario Panhispánico de Dudas de dicha institución. Desfasaje es una palabra derivada de desfasar que se creó por analogía al francés déphasage. En algunos países sudamericanos, desfasaje se utiliza con mayor frecuencia que desfase, a diferencia de lo que ocurre en España y en otras naciones.
Dentro del ámbito de la educación también se utiliza el término que nos ocupa. En concreto, se habla de desfase curricular, que viene a emplearse para hacer mención a alumnos que se encuentran asistiendo a las clases de una asignatura en la que tienen un nivel de conocimientos y destrezas que es inferior al que ya deberían tener. De ahí que necesiten adaptaciones curriculares.
Así, se puede decir que pueden tener desfase curricular estudiantes, por ejemplo, con necesidades específicas tales como trastornos graves de conducta, dificultades graves de aprendizaje, con discapacidad, con trastornos de déficit de atención…
