El enanismo es una alteración del crecimiento que se caracteriza por una estatura que resulta muy inferior al promedio de las personas de la misma raza y edad. Quien tiene enanismo es llamado enano, aunque el término puede considerarse ofensivo.
Las burlas hacia las personas con enanismo son muy frecuentes, y esta falta de respeto se puede apreciar especialmente en el mundo del espectáculo, donde los enanos suelen ser figuras «graciosas», simplemente por las características de sus cuerpos. Los programas de humor recurren con mucha frecuencia al enanismo para conseguir risas fáciles y esto educa a la sociedad en la falta de compasión de una manera extremadamente peligrosa, que luego se refleja en la escuela, en la oficina y en la vía pública.
El individuo con enanismo no solo no alcanza la talla media de su especie, sino que queda muy lejos de ella. A modo de referencia, puede decirse que las mujeres con una altura inferior a 1,30 metros y los hombres que miden menos de 1,40 metros padecen enanismo, aunque la condición depende de múltiples factores.
Las causas del enanismo pueden ser diversas. Una alteración genética, una deficiencia en la hormona de crecimiento y enfermedades y trastornos como la acondroplasia, la hipocondroplasia y el cretinismo pueden provocar el desarrollo de enanismo.
El motivo más frecuente de enanismo es la acondroplasia, producida por una alteración del ácido desoxirribonucleico (ADN) que afecta la formación de los cartílagos. Esta mutación hace que los huesos largos se acorten, dando lugar a brazos y piernas más cortos de lo habitual. Esta forma de enanismo también suele caracterizarse por la macrocefalia.
La persona con enanismo por acondroplasia, por lo tanto, suele tener cabeza grande, tronco normal y extremidades muy cortas. Por el momento no se conoce un tratamiento efectivo para resolver el trastorno.
En el caso de quienes tienen enanismo por problemas en la hipófisis (glándula que produce una cantidad insuficiente de hormona de crecimiento), en cambio, pueden recibir tratamientos que consisten en el suministro de la hormona en cuestión.
A grandes rasgos, es posible diferenciar dos categorías de enanismo bastante amplias, que permiten un estudio más acotado de las causas y los síntomas, a la vez que se llevan a cabo las investigaciones para hallar tratamientos eficaces:
* enanismo desproporcionado: como su nombre lo indica, se trata de aquél que acarrea proporciones incorrectas en el cuerpo. Podemos decir que estas personas tienen algunas partes de un tamaño inferior al normal y otras más grandes de lo normal o bien de tamaño promedio. En estos casos se da una clara inhibición del crecimiento de los huesos;
* enanismo proporcionado: los individuos de este grupo poseen cuerpos de estatura excesivamente baja pero las dimensiones de todas sus partes son proporcionalmente más pequeñas. Aquí podemos hablar de ciertas enfermedades que ya están presentes en el momento del nacimiento o bien que se manifiestan durante la primera infancia, y que bloquean el normal desarrollo del cuerpo.
Es muy importante señalar que el enanismo no acarrea de forma directa una deficiencia en las capacidades intelectuales del individuo, las cuales pueden darse como resultado de factores secundarios, tales como la hidrocefalia (una cantidad excesiva de líquido en el cerebro).
Nadie debería sentir lástima por las personas con enanismo, ni pensar que sus vidas están necesariamente limitadas por su estatura. De hecho, muchos de ellos logran tanto o más que quienes gozan de cuerpos «normales». Tal es el caso de Peter Dinklage, uno de los mayores exponentes del cine y la televisión norteamericana. Se trata de un actor nacido en 1969, que ha participado de la serie Juego de tronos y de la película X-men: días del futuro pasado, entre otros títulos de gran importancia.
