Una especie endémica es aquella que se distribuye en un ámbito geográfico reducido y que no se encuentra de forma natural en otras partes del mundo. El endemismo, por lo tanto, refiere a una especie que sólo puede encontrarse naturalmente en un lugar.
Antes de avanzar, lo que vamos a hacer es encontrar el origen etimológico de las dos palabras que dan forma al concepos:
- Especie es un vocablo que emana del latín y más concretamente de species, que es equivalente a “imagen o apariencia”.
- Endémica, por su parte, tiene su procedencia en el griego. Y es que así se comprueba al analizar la estructura que posee: el prefijo en-, que es sinónimo de “dentro”; el sustantivo demos, que puede traducirse como “pueblo”; y finalmente el sufijo -ico, que viene a significar “relativo a”.
El endemismo
Las especies son, para la zoología y la botánica, los grupos en que pueden dividirse los géneros. Al integrar una misma especie, los individuos comparten los caracteres genéricos y otros factores que hacen que se asemejen entre sí y se diferencien de los integrantes de otras especies.
Endémico, por otra parte, es lo perteneciente o relativo a la endemia. Este concepto suele utilizarse para nombrar a una enfermedad que reina en una región o época.
En este sentido podemos decir que existen muy diversos tipos de endemismo: el paleoendemismo, el patroendemismo, el criptoendemismo, el esquizoendemismo y el apoendemismo, entre otros.
La consideración del endemismo puede variar en distintas escalas. Es posible hablar de una especie endémica de una cadena montañosa, un lago, una isla, un país o un continente, lo que demuestra la amplitud del concepto. Pese a que suele referirse a las especies, el endemismo también puede aplicarse a subespecies, géneros, familias u otros taxones.
Ejemplos de especies endémicas
El lince ibérico es un ejemplo de especie endémica, en este caso de la Península Ibérica. Se trata de un mamífero carnívoro de la familia Felidae que está en peligro de extinción ya que se estima su población en menos de cuatrocientos individuos.
El mencionado lince actualmente está siendo objeto de especial cuidado y atención por las autoridades, que han conseguido establecer dos importantes poblaciones, una en Andalucía y otra en la zona de Toledo.
Es interesante saber que México es uno de los países que posee más especies endémicas especialmente a nivel animal. En concreto, entre aquellas se encuentran el águila arpía, la tortuga grieta o tortuga marina verde del Pacífico, la grulla blanca, el armadillo de cola desnuda y el oso hormiguero conocido por el nombre de chupamiel.
En otros países de América también existen especies endémicas de gran valor y reconocimiento a nivel internacional. Así, por ejemplo, en República Dominicana se encuentra el zorzal de la selle, en Ecuador está el pingüino de las Galápagos, en Perú nos encontramos con la rata Pattonomys occasius y en Colombia vive el murciélago que recibe el nombre científico de Artibeus jamaicensis coryi.
La mayor parte de las especies endémicas se encuentran en las islas, ya que el aislamiento geográfico contribuye a la preservación del endemismo. Australia, de este modo, presenta numerosas especies endémicas, tanto de flora como de fauna.