Eucalipto es un concepto que proviene del latín científico eucalyptus, a su vez derivado de la lengua griega: eû (que puede traducirse como “bien”) y kalyptós (que significa “cubierto”). Un eucalipto es un árbol que forma parte del grupo familiar de las mirtáceas.
TemasCaracterísticas generales
Nativo del territorio australiano, el eucalipto puede alcanzar una altura de unos cien metros. Presenta un tronco recto con una copa cónica, hojas lanceoladas, flores amarillentas y fruto con múltiples semillas.
La tasa de crecimiento del eucalipto es de 1 metro por año
La madera y las hojas del eucalipto se aprovechan de distintas maneras. Es habitual que los eucaliptos sean plantados por la industria maderera y la industria papelera ya que crecen con rapidez. Estamos hablando de una media de 1 metro por año, algo que lo sitúa entre las plantas con una mayor tasa de desarrollo por unidad de tiempo en todo el planeta.
Reforestación y riesgos
Ese crecimiento también invita a emplear eucaliptos en planes de reforestación. Sin embargo, se debe prestar atención al equilibrio ecológico y no afectar a la biodiversidad.
La variedad de especies en un mismo ecosistema no es algo que debamos tomar a la ligera, ya que el planeta se desarrolla y se sostiene basado en el equilibrio, en el trabajo conjunto de muchos organismos y fenómenos diseñados a la perfección para complementarse. Quitar o alterar tan sólo uno de ellos, algo que los seres humanos llevamos haciendo desde hace miles de años, trae consecuencias de variada gravedad.
El eucalipto es un árbol que, de acuerdo con diferentes estudios, agota el suelo, le quita todos los nutrientes. Esto se puede entender si prestamos atención a su ya mencionado ritmo de crecimiento. Por esta razón, tampoco se aconseja plantarlo en pequeños espacios, como ser jardines. Además, la intrusión que provocan sus raíces no es ideal para ámbitos urbanos, donde hay tuberías y otras instalaciones subterráneas que no resistan la fuerza con la que avanzan.
Diferentes especies
Cabe destacar que existen diferentes especies de eucaliptos. El eucalipto rojo (Eucalyptus camaldulensis), por ejemplo, se utiliza para obtener leña y para favorecer la polinización con abejas. El eucalipto azul o eucalipto blanco (Eucalyptus globulus), en tanto, tiene múltiples usos.
Su consumo
El aceite esencial que se obtiene de las hojas de los eucaliptos es desinfectante y se destina al tratamiento de afecciones respiratorias. Con esta sustancia se preparan caramelos, jarabes, infusiones y ungüentos que también se utilizan para aliviar dolores articulares y de los músculos.
La mayoría de la gente recurre a las hojas de eucalipto para preparar bálsamos con efectos expectorantes, ideales para tratar la congestión nasal y calmar diferentes problemas respiratorios pasajeros. Con este objetivo, se pueden echar unas cuantas hojas en un recipiente con agua hirviendo para luego inhalar el vapor durante varios minutos.
También se puede usar para mantener la piel sana y limpia, gracias a sus propiedades antisépticas y su rico aroma. Esto se extiende al cabello, ya que el eucalipto puede devolverle su brillo y eliminar los hongos. Al beberlo, no sólo recibimos los beneficios ya mencionados de purificación, sino que también regulamos los niveles de azúcar en la sangre.
Las hojas del eucalipto son ideales para tratar problemas respiratorios
Contraindicaciones
Es importante indicar que el consumo de eucalipto cuenta con contraindicaciones. Entre las posibles reacciones adversas se encuentran los trastornos digestivos y los problemas respiratorios. Su aceite esencial, por otra parte, no es recomendado para embarazadas ni para mujeres lactantes.
Más arriba mencionamos que el eucalipto sirve para reducir el nivel de azúcar en la sangre; si bien esto es positivo, un exceso de esta planta puede llevar causar un descenso por debajo de lo normal. También se sabe que causa somnolencia, de manera que no se recomienda antes de actividades que exijan energía y atención.
